Unas 10.000 personas de entre 18 y 44 años, y que disponen de ingresos económicos, tienen necesidad de acceso a una vivienda en Bilbao, según el informe que hizo público ayer el concejal delegado de Vivienda, Jon Bilbao.
A fecha de 31 de diciembre de 2020, según el diagnóstico municipal, Bilbao contaba con un parque de 165.296 viviendas familiares, de las que 15.408 (10,5%) son en alquiler, con un incremento del 5% en los últimos 10 años y una edad media de los edificios de 53 años.
El precio medio de una vivienda nueva se situaba en 3.594 euros el metro cuadrado; la usada, en 3.416 euros el metro cuadrado, y el alquiler medio estaba en 780 euros al mes, aunque el alquiler privado se elevaba a un promedio de 1.080 euros.
El informe indica que, a pesar de que en la última década el ritmo de construcción de nuevas viviendas ha sido bajo, con una ratio de 5,7 viviendas por cada 1.000 habitantes, en los últimos cinco años se aprecia una recuperación del ritmo de construcción, tras la caída experimentada en los años 2014 y 2015.
Estos aspectos dificultan el derecho subjetivo a la vivienda que tienen todos los ciudadanos. De hecho, Bilbao recibió entre los años 2015 y 2020 unas 6.000 solicitudes para acceder a una residencia. El resultado fue la adjudicación de 536 viviendas en alquiler social y la concesión de 810 prestaciones económicas para el pago de la renta.
Sin embargo, según datos del Observatorio Vasco de la Juventud, en el 6% de los hogares del territorio de Bizkaia reside al menos una persona con necesidad de acceder a su primera vivienda. De hecho, cabe destacar que unas 37.000 personas de entre 18 y 34 años aún residían en la vivienda familiar en el año 2020. Y se estima que unas 10.000 personas de entre 18 y 44 años con ingresos tienen necesidad de una vivienda en Bilbao. "Podrían pagar un alquiler, pero igual la situación y los precios no se lo permiten", dijo.
En el último trimestre de 2020 Bilbao recibió más de 16.000 solicitudes en el Servicio Vasco de Vivienda, Etxebide.
Desde 2014 la demanda de vivienda protegía de población empadronada en el municipio de Bilbao no ha dejado de crecer.
El estudio revela también que 6 de cada 10 expedientes de solicitud corresponden a unidades familiares de una sola persona.
De las más de 15.000 viviendas en régimen de alquiler existentes en Bilbao, 9.312 son de alquiler libre y 6.173 de alquiler social. Más de 14.600 alquileres -el 94% del total- están subvencionados por ser vivienda protegida o por recibir ayuda económica para el pago de la renta.
En cuanto a la rehabilitación, el diagnóstico municipal calcula que al menos el 5% de las viviendas de la capital vizcaina necesita algún tipo de arreglo. Las instituciones concedieron el pasado año 4,8 millones de euros en subvenciones para tareas de rehabilitación: la sociedad municipal Surbisa otorgó ayudas por valor de 2,1 millones, el Gobierno vasco destinó 2,2 millones de euros y el área municipal de Planificación Urbana concedió 550.000 euros.
Las ayudas se han distribuido en seis barrios del municipio con una importante concentración en Bilbao La Vieja y Casco Viejo.