Los meses de verano son, sin duda, los que habitualmente dedicamos a viajar más y, por tanto, los que menos estamos en casa. Esto tiene su cara B y es que julio y agosto también son los meses del año en que más crecen los robos con violencia en las viviendas. Por ejemplo, en Gipuzkoa se registran, de media, un 20% más de robos entre junio y septiembre que durante el resto del año.
De hecho, en los últimos días hemos conocido que en algunas localidades de este territorio, como Hernani, Andoain o Azkoitia, tanto Ertzaintza como Policía Municipal han detectado la presencia de varias señales instaladas por los ladrones para comprobar si la vivienda está habitada. Se trata por ejemplo de marcas de silicona, tal y como nos ha explicado en Onda Vasca con Iranzu Calvo, David Villa, del Servicio de Portavocía y Comunicación de la Ertzaintza. Se trata de unos hilos de silicona que suelen colocar "entre la jamba, que es la parte fija de la puerta, y la propia puerta. Entonces, los ladrones periódicamente pasan para ver si sigue unido el hilo". Si está separado, "significa que hay presencia de personas, que hay trasiego y, por tanto, la descartan" pero, si continúa unido, concluyen que la vivienda está deshabitada y podría ser su objetivo.
Además de la silicona, los ladrones utilizan otros métodos como el "taquito de cartón, que lo colocan entre la puerta y la jamba y si ese cartoncito está caído es que alguien ha entrado a la vivienda" o incluso "dibujos en el marco de la puerta, en un lugar donde habitualmente no miramos cuando vamos a acceder a la vivienda". Por ello, "es fundamental", asegura Villa, "que miremos en todo el entorno de la puerta que es donde suelen dejar esos marcadores y no que solo hagamos lo que hacemos habitualmente: la cerradura y el pomo para abrir".
Si descubrimos uno de estos marcadores, la recomendación de la Ertzaintza es clara: "inmediatamente llamar al 112". También si vemos a alguien sospechoso "en el portal o en las inmediaciones".
Recomendaciones para evitar robos
Pero esta no es la única recomendación. Para evitar robos en nuestra vivienda, mientras estamos de viaje, la Ertzaintza ofrece una serie de consejos que podemos seguir. Son estos:
1.- Evitar comentar en presencia de extraños las fechas en las que vamos a disfrutar de las vacaciones.
2.- No publicar en redes sociales, ni antes ni mientras estamos de vacaciones. fotos de que estamos fuera porque eso lo suelen monitorizar.
3.- Desviar el teléfono fijo al móvil para dar una imagen de que permanecemos en el domicilio.
4.- Guardar las joyas y otros objetos de valor en un lugar seguro, no en los joyeros o en los armarios como podríamos hacer habitualmente.
5.- No bajar las persianas del todo, cuando nos marchamos de casa.
6.- Si se dispone de una alarma, hay que acordarse de activarla antes de abandonar la vivienda.
7.- Valorar la instalación de cerraduras de seguridad para evitar los métodos de ataque a las cerraduras más habituales (esto se puede consultar con un profesional del sector)
8.- Una vez que nos hemos marchado de vacaciones, hablar con un familiar o un amigo que revise periódicamente la vivienda, que nos vacíe el buzón, si han limpiado la escalera, que nos recoloque el felpudo frente a la puerta o que nos varíe la posición de las persianas. La idea es hacer ver que la vivienda se encuentra habitada.
9.- Si en torno a la vivienda hay instalados andamios, por una obra, cerrar todas las puertas y ventanas, no dejar ningún objeto de valor a la vista y solicitar una alarma que abarque también esos andamios por si los ladrones pretenden trepar por ellos para poder acceder por algunas de las ventanas superiores.
10.- Finalmente, si al llegar a la vivienda nos encontramos con los ladrones dentro o si entra alguien mientras nosotros estamos dentro de nuestro domicilio, hay que evitar el enfrentamiento, ponernos a salvo y avisar a la Ertzaintza. Si al llegar, lo que observamos es que la puerta está fracturada o la cerradura está rota, hay que evitar entrar en la vivienda, no tocar nada y llamar al 112.
Todos podemos sufrir un robo
David Villa cree que "siempre" somos algo ingenuos y pensamos que "esto no me va a pasar a mí", que nuestra vivienda "por alguna razón, está tocada por una varita" y no nos va a ocurrir. Sin embargo, nadie estamos libres de ser susceptibles de un robo, "te puede pasar a ti como al vecino", añade Villa.
Por ello, afirma David Villa, "el mensaje a trasladar es que la prevención evita disgustos". Así, considera que "cualquiera de las medidas que hemos comentado y que podamos aplicar, nos puede evitar un disgusto a la vuelta". Y en este sentido insiste, sobre todo, en el tema de las redes sociales: "¿Qué prima más: el postureo o que te puedan robar en casa? Hay que darse cuenta que es más importante lo segundo que lo primero".