La Zona de Bajas Emisiones actuará también como palanca de la Estrategia ‘Go Green Pamplona’ de Transición Energética y Cambio Climático, entre cuyos objetivos se incluye la descarbonización del sector del transporte y la movilidad, que actualmente supone el 56% de la cuota de emisiones de CO₂ de la ciudad.
El Casco Antiguo se convertirá en la primera zona de bajas emisiones de Pamplona
Los estudios realizados en Pamplona indican que la exposición a los gases contaminantes son los responsables de 120 ingresos hospitalarios al año.
Según las conclusiones del proyecto de investigación Life+Respira, un estudio de la Universidad de Navarra y realizado hace tres años, en una ciudad como Pamplona, de características similares al 80% de las urbes europeas, la población se ve expuesta con relativa frecuencia a niveles de contaminación superiores a los recomendados por las autoridades sanitarias.
Esta exposición a contaminantes supone un notable deterioro para la salud de los ciudadanos.
Las mediciones realizadas en el estudio, el mayor realizado en Europa de este tipo, indican que la contaminación varía notablemente en función de la climatología, la zona de la ciudad y la hora del día.
gases Aunque el tráfico motorizado es la principal fuente de contaminación, en invierno se aprecian niveles altos de partículas en suspensión en las zonas residenciales, debido al uso de chimeneas domésticas de leña.
Los registros también confirmaron que la vegetación puede reducir notablemente la contaminación, de modo que los parques y jardines actúan como pulmones que limpian el aire urbano. Sin embargo, no todos los árboles tienen el mismo efecto reductor. En Pamplona sólo el 9% de los árboles son de hoja perenne, que son los que más reducen la contaminación.