La autopista AP-8 está registrando retenciones de hasta 14 kilómetros desde la muga de Biriatou en dirección a Baiona. La gran afluencia de camiones tras los días festivos de esta pasada Semana Santa está provocando que el colapso llegue casi hasta Donostia, afectando a otras carreteras cercanas, como la GI-636, en Hondarribia, Irun y Lezo.
En dicho trayecto, y en idéntico sentido hacia Iparralde, se ha producido en Oiartzun una colisión entre tres vehículos que no ha dejado heridos pero que dificultan aún más la marcha.
Además, el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco confirma que en la propia AP-8 está registrando retenciones de dos kilómetros en el kilómetro 61 a la altura de Mendaro, en sentido hacia la capital guipuzcoana, en esta ocasión por unas obras que también están ralentizando el amplio volumen de tráfico existente.