En otro de los municipios fuertes en industria de Aiaraldea, ha sido Aceralava (la planta de Tubacex en Amurrio) la que terminaba el año 2022 premiada por la plataforma Enertic por las medidas de ahorro energético implantadas en su sistema de producción. De hecho, los Premios enerTIC Awards, que han alcanzado su décima edición, constituyen un reconocimiento a las iniciativas y trayectorias profesionales más relevantes en la promoción y aplicación de la tecnología y la digitalización, para la mejora de la competitividad energética y la sostenibilidad.
La razón de este premio –entregado en la sede de la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial en Madrid, y que ha galardonado a un total de 15 proyectos de toda España con foco en la competitividad energética a través de la tecnología, así como a diez directivos tanto del sector público como el privado– ha estado en un proyecto referente en energía verde y eficiencia energética a través de las TIC, denominado Cogniplant, que Tubacex está abordando en sus instalaciones de Amurrio, con el objetivo de transformarlas en una planta inteligente, con reducciones muy significativas del consumo energético en los hornos y de los defectos y rechazos.
En concreto, guiado por su socio tecnológico, Ibermática, que le ha ayudado en la innovación y aplicación de nuevas tecnologías, Tubacex ha llevado a cabo una digitalización integral de todos los parámetros del proceso de producción de su planta de Amurrio, para su posterior optimización en base a técnicas de Data Analytics, ML y Digital Twin. Es decir, se trata de un proyecto que permitirá optimizar el proceso de producción de los tubos que fabrica esta empresa, con un ahorro anual de 3,5 gigavatios-hora (Gwh) y una reducción de las emisiones de CO₂ en 6.000 toneladas anuales, el 15% de las que emite la planta.
Digital e inteligente
Este ahorro lo consigue por dos vías complementarias: la optimización de los hornos, tanto el de fundición como el de descarburización, y el aumento de la eficacia del proceso de la planta, cubriendo desde fundido, lingotado y forja hasta la creación de tubos y los problemas de calidad que estos presentan. Para ello, trabajan, desde la innovación, en no sólo digitalizar la planta sino hacerla inteligente, con tres objetivos principales. En primer lugar estaría el de reducir el material de desecho. “En la producción de acero inoxidable, no es posible comprobar la calidad en cada paso, postergando la detección de errores, lo que incrementa el volumen de rechazo interno. Sin embargo, mediante modelos de ML que permiten establecer relaciones ocultas entre los procesos y los problemas de calidad que estos presentan”, apuntan desde la web de la empresa.
Otro de los objetivos se encuentra en maximizar la eficiencia energética del horno eléctrico; es decir, “procesar datos del proceso de fundido del horno para crear un Gemelo Digital basado en modelos de ML, que facilite la búsqueda del proceso óptimo de fundido de los componentes, y tenga en cuenta el grado de acero objetivo y los elementos de la colada”, explican. Por último, con el proyecto Cogniplant se pretende maximizar la eficiencia del horno AOD, mediante “el desarrollo de modelos de ML que optimicen su consumo energético y de gases y, además, ofrezcan recomendaciones para la optimización de la producción”, añaden.
Visión novedosa
Aceralava contará así con una visión novedosa de la monitorización y el análisis de datos, aprovechando los últimos desarrollos en analítica avanzada y razonamiento cognitivo, junto con un uso disruptivo del concepto Digital Twin para mejorar el rendimiento de la operación. La información de los seis grandes procesos que componen la planta de Amurrio se obtiene de sensórica instalada exprofeso y, sobre todo, de los sistemas de gestión preexistentes. Toda esta información conforma el Datalake interno en el que se recoge la información para su posterior envío a la plataforma cloud, que sirve de origen de datos a las diferentes herramientas de Machine Learning que conformarán los procesos de análisis y decisión. En definitiva, otro claro ejemplo de que la industria de Aiaraldea apuesta al verde y la tecnología más puntera, en estos tiempos de obligada transición hacia un modelo energético sin emisiones, que lleva la descarbonización por bandera, conscientes del reto al que se enfrenta nuestro planeta para frenar el calentamiento global.