- La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Estella decretó ayer al mediodía el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de Santiago Martínez, de 63 años, detenido el sábado por intentar matar a su pareja, A.D., de 54 años, en Azagra el pasado sábado. Justifica la medida en el riesgo de fuga y en evitar la reiteración delictiva y que, por tanto, vuelva a atacar a su pareja. La víctima se encuentra ingresada en estado muy grave en Pamplona, en el Complejo Hospitalario de Navarra. En el auto, que puede ser recurrido, la jueza imputa al investigado delitos de asesinato -en este momento en grado de tentativa-, violencia doméstica y de género, lesiones y maltrato familiar. No había denuncias previas.
En la comparecencia prevista para la adopción de medidas cautelares, el Ministerio Fiscal y la acusación que ejerce el letrado del Servicio de Asistencia a la Mujer del Colegio de Abogados de Estella pidió el ingreso en prisión comunicada y sin fianza del imputado, una solicitud a la que se ha adherido la acusación particular. La defensa, por su parte, interesó la libertad provisional y, subsidiariamente, prisión eludible bajo fianza de 6.000 euros, según el TSJN.
En la resolución judicial, la magistrada decreta el ingreso en prisión debido al riesgo de fuga por la elevada pena prevista el delito de asesinato -castigado con entre 15 y 25 años de prisión, pena que en el caso de que la víctima sobreviviera se aplicaría en grado de tentativa-, así como para evitar que el investigado pueda volver a atentar contra su pareja. Según recoge el auto, la pareja se encontraba en trámites de separación. Ente las 11.15 y las 12.05 horas del sábado, dentro del domicilio que compartían, el presunto agresor cogió un bastón metálico de color cobre, acudió al dormitorio de su pareja y comenzó a golpearla en la cara y cabeza "con la intención de acabar con su vida", mientras que ella intentaba protegerse con los brazos, llegando incluso a impactar varios de estos golpes en la pared.
Según el relato de la jueza, una vez entendió el arrestado que había matado a su pareja, condujo su vehículo hasta la comisaría de la Policía Foral en Estella y confesó que había matado a su mujer y el lugar donde ella se encontraba. Los agentes acudieron al domicilio, entraron por la puerta del garaje, que estaba abierta, y llegaron a la habitación del segundo piso en la que se encontraba la víctima, todavía con vida. Debido a la gravedad de sus heridas, fue trasladada al hospital en helicóptero e ingresó en estado crítico. Presenta fractura craneal con desplazamiento óseo, hematomas en los ojos y múltiples heridas inciso-contusas de origen traumático.
La jueza recuerda que el detenido se acogió a su derecho a no declarar y solo respondió a preguntas de su defensa que no contribuyeron a esclarecer los hechos.