Un sabor agridulce es el que le ha dejado a la hostelería la decisión de LABI de ayer. Es unánime el agradecimiento por prolongar el horario del sector hasta las doce de la noche pero opina que ampliar el número de comensales por mesa es ahora casi más importante con el fin de conseguir mantenerse a flote.
Así lo cree Sergio Ortiz de Zarate, Estrella Michelín en su Zarate Jatetxea. Desde Madrid, donde participa hoy en el feria gastronómica Madrid Fusión, ha dejado claro de base a DEIA que "es genial, porque vamos a poder dar cenas, algo que hasta ahora no tenía sentido hasta las 10 de la noche". Sin embargo, ha planteado cómo "es ilógico que nos mantengan cuatro comensales por mesa cuando en cualquier casa, o en un banco del parque, se pueden juntar 18 a tomar un café de llevar y sin mascarilla. Y antes era ilegal, pero ahora no lo es. Es para rebelarse".
David Bezanilla, responsable del 11 Aldeanos y el Txirene, dos restaurantes expertos en cenas de grandes grupos va más allá. "Hubiera sido mejor que ampliaran la capacidad de las mesas", ha indicado. Porque el horario limitado actual "ha supuesto muchas peleas con clientes que entraban a cenar a las ocho y a los que a las 10 les tenías que levantar sin darles tiempo para postre y café... Ser el polícia malo siempre, cansa", ha reconocido. Con reservas hasta la medianoche "se va a solucionar algo la situación" aunque ha intuido que "la gente seguirá siendo igual, si antes te pedían media hora más, ahora también lo harán más allá de las doce". Eso sí ha augurado que "vamos a tener más reservas de cara a la semana próxima, seguro".
"Un porrón de reservas"
Ya las tiene para este mismo sábado Fernando Canales, otro chef bilbaino Estrella Michelin, que observa el futuro con optimismo desde su Atelier Etxanobe. "Han entrado hoy (por ayer) un porrón de reservas para cenar. El sábado ya está cerrado", ha desvelado a este periódico. Ha considerado que "para nosotros las cenas son super importantes. La limitación actual, hasta las diez de la noche era una trampa".
Aunque daban cenas a partir de las 7.30 de la tarde "no daba tiempo a servir y el servicio lo hemos limitado. Como mucho atendíamos a 20 personas en un restaurante con capacidad para 200 personas", ha descrito.
El nuevo escenario a partir de esta noche le va permitir a Canales "sacar más gente del ERTE en una plantilla que supera las 25 personas" ya que "las cenas significan más del mitad de nuestra facturación". Igual situación ha planteado el chef de Zarate Jatetxea. "Te quitan el 50% de la capacidad que tenemos al mediodía por aforo restringido y el 100% de la noche. Nos han dejado un máximo de un 25%, que no siempre llega, de la capacidad de facturación ¿qué otra empresa soportaría eso?", ha lamentado Sergio Ortiz de Zarate.
Bezanilla ha puesto encima de la mesa así mismo el handicap estacional. "En breve, acaban los colegios, las amatxus escapan con los críos al pueblo y con el verano mucha gente tiene ganas de marcharse de Bilbao tras más de un año en blanco". Canales también ha percibido "ese momento especial con muchos habituales que quieren irse de vacaciones fuera sin haber entrado todavía el turismo en Bilbao", pero no se desanima. "El cliente local se ha portado de maravilla en estos tiempos difíciles para todos y con el ritmo de vacunación actual vamos a tener más noticias positivas", ha especificado.
Toda esta nueva actividad nocturna en ciernes va a suponer, según Jorge Aio, gerente de la asociación Bilbao Centro, que "también se beneficien tanto los establecimientos y bares que no ofrecen cenas, así como el comercio en general. Es un mix comercial en el que la ciudad gana". Aio, en representación de 150 locales hosteleros entre los 550 comercios de la asociación, ha reflexionado que la medida tomada "supone ver el final cerca, son pasos adelante que psicológicamente son muy importantes".
Ha coincidido el chef del Atelier Etxanobe. "Después de tanto tío vivo, la situación es ya irreversible, estamos en la recta final y a día de hoy los clientes tienen ganas de disfrutar y nosotros de hacérselo posible", ha concluido.