El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, se ha mostrado preocupado por la evolución de la pandemia del coronavirus y ha insistido en pedir a la ciudadanía responsabilidad y compromiso en su modo de actuar porque, según ha advertido, "el virus sigue estando entre nosotros".
Aburto, en declaraciones a los periodistas tras presentar el plan estratégico del comercio en Bilbao hasta 2025, ha señalado que "la responsabilidad no tiene edad y todos y cada uno tenemos que ser absolutamente responsables" y "actuar de forma comprometida con la situación que seguimos viviendo".
El alcalde ha expresado su "preocupación" por la incidencia del coronavirus en Bilbao, que, al igual que en la Comunidad Autónoma Vasca, está situada "por encima de 150" –positivos por 100.000 habitantes–.
"Según Bizi Berri III -el plan del Gobierno Vasco de respuesta a la pandemia- estaríamos en una escenario diferente", ha indicado Aburto, quien ha añadido que "es verdad que hay una tensión hospitalaria inferior", lo que es "una buena noticia, pero no podemos relajarnos", ha reiterado.
"Esto no es cuestión de que algunos tienen que hacer las cosas bien y otros no importa cómo las hagan. Cada uno tenemos que ser parte de la solución y no convertirnos en un problema", ha afirmado.
Respecto a la posibilidad de que el comité asesor del Plan de Protección Civil de Euskadi (LABI) pudiera adoptar nuevas restricciones el próximo miércoles vista la evolución de la pandemia, el alcalde ha instado a esperar y atender los criterios que transmitan "desde el ámbito científico, técnico, epidemiológico".
"Hay que ver lo que dice el comité asesor técnico del LABI", ha señalado el responsable municipal, quien ha puesto de manifiesto que a veces "toca" tomar decisiones "muy duras", pero se adoptan desde "un ámbito de absoluta responsabilidad". Según ha insistido, "por dolorosa que sea nuestra actuación, siempre ha sido" en respuesta a lo que indican "los criterios técnicos científicos".
SIN FIESTAS UN AÑO MÁS
El alcalde de Bilbao ha admitido que dejar este año a Bilbao sin fiestas ha sido una decisión "dura" de tomar. Es el evento "más internacional que tenemos en la villa, pero hemos tenido que actuar con responsabilidad, pensando en lo que era bueno para la ciudad y para la salud", ha explicado.
El alcalde ha destacado la unanimidad entre todos los agentes implicados para que no haya fiestas este año y para "poner todas nuestras ilusiones en las fiestas del año que viene, donde habrá que echar el resto y esperamos que lo hagamos en situación de pandmeia superada", ha deseado.