Han pasado casi tres años desde que Marijaia se despidió de Bilbao, ardiendo en la ría, con la promesa de regresar renovada al año siguiente. Pero no pudo ser; la pandemia enmudeció los acordes de los conciertos, dejó desierto de txosnas del recinto festivo de El Arenal, apagó las luces de las barracas del Parque de Etxebarria y borró de un plumazo el ambiente festivo de las calles. Pero ese año sí; los nueve días que van del 20 al 28 de agosto de 2022 serán escenario de la que probablemente sea la Aste Nagusia más esperada de la historia y en la que ya trabaja el Ayuntamiento de Bilbao. "Queremos que sea una Aste Nagusia que quede en el recuerdo", avanza el alcalde, Juan Mari Aburto.
Son nueve días de fiesta que no se organizan de víspera; detrás de un programa festivo con más de un millar de actos gratuitos y para todos los públicos, desde conciertos a fuegos artificiales, representaciones teatrales, barracas y circo, espacios para los más pequeños de la casa, concursos gastronómicos, exhibiciones de deporte rural o citas deportivas. "Estamos trabajando con toda la ilusión para que tengamos una Aste Nagusia después de estos dos años tan difíciles y complicados; esperemos que la evolución de la pandemia nos siga llevando por el buen camino y en agosto podamos disfrutar de unas fiestas que sean para los bilbainos y bilbainas, y también para la gente que venga a vernos, un elemento absolutamente ilusionante y que nos genere mucha alegría", confía el alcalde.
"VOLCADOS" EN LAS FIESTAS
El equipo encabezado por la concejala de Igualdad, Cooperación, Convivencia y Fiestas, Itziar Urtasun, trabaja ya en que todo esté a punto para recibir como se merece a Marijaia ese 20 de agosto para el que queden poco más de cien días. "Estamos trabajando en los espacios, en los conciertos, en las barracas... Es mucha la labor que hay que hacer y el equipo de Itziar Urtasun está volcado hacia la programación de Aste Nagusia", avanza el alcalde.
Y es que, por fin, este año sí, toda la alegría festiva de esos días inundará cada rincón de Bilbao. "La diferencia es, precisamente, que este año sí vamos a poder celebrar las fiestas. Vamos a intentar que sea una Aste Nagusia que recordemos todos después de estos dos años duros sin ella", promete Aburto. "Tanto los bilbainos como los que nos visiten pueden esperar alegría, emoción, un uso a tope del espacio público, música, teatro, txosnas, un txikigune magnífico para los txikis de la villa... La de 2022 será una Aste Nagusia para el recuerdo".
Y todo, advierte, sin olvidar las medidas de seguridad que estén vigentes en ese momento. "Tendremos que seguir mirando no de reojo, sino de frente, a la pandemia para ver cuál es la evolución que esté siguiendo y las medidas que en ese momento haya que adoptar. Siempre lo hemos hecho de esa manera, siempre hemos seguido las directrices que se marcaban desde el departamento de Salud del Gobierno vasco y, evidentemente, también lo haremos en este caso", avanza el alcalde de Bilbao.