Ante los rumores sobre nuestra participación en la elaboración de un nuevo convenio, quiero aportar algunas aclaraciones que ayuden a entender mejor la situación real. El borrador del convenio se trasladó al Equipo de Gobierno dos años y medio después de iniciarse la legislatura. Así, la tramitación de este convenio ha coincidido con todo el proceso de estabilización del personal, con todo lo que ello supone para el área de Recursos Humanos en cuanto a carga de trabajo, lo que nos llevó a trasladar al Comité que este proceso se alargaría mucho y nos íbamos a plantar en el final de legislatura sin garantías de un acuerdo completo y que nos parecía más adecuado que se realizara con la nueva corporación.
En este punto, es importante indicar que el convenio anterior sigue en vigor, por lo que el personal no está desprotegido; es más, es un muy buen convenio. Además, se han mantenido varias reuniones dentro del marco de la Comisión Paritaria (conformada a partes iguales por representantes sindicales y políticos) y también entre el Comité y Alcaldía. Hace muchos meses, cuando se les indicó que no nos parecía adecuado negociar el convenio en todo su conjunto, yo personalmente les informé de que le había dado una primera lectura superficial y que había recogido algunas anotaciones que iba a profundizar. En ningún momento dije, como así señalan algunos, que no lo hubiera leído, por lo que interpreto esa información como una tergiversación de mis palabras que me gustaría denunciar. Es más, van ya varias lecturas del borrador por mi parte, así como contrastes del mismo con personas de mi confianza, la última esta misma semana. Sigo revisando el documento porque adquirí el compromiso de negociar antes de finalizar la legislatura. Esta opción se habló en la Comisión Paritaria realizada el 14 de febrero, y no he recibido respuesta del Comité su propuesta de puntos prioritarios.
Lo que si ha habido desde entonces, ha sido el envío de un correo por mi parte con fecha 1 de marzo, una comisión de personal el pasado lunes, varias reuniones para constituir los tribunales, unas pruebas de selección para auxiliares de Policía, la finalización del trámite para abonar atrasos salariales de la Policía Municipal... Es decir, la relación y el trabajo con la representación sindical está siendo constante. Sigo esperando la propuesta del Comité para abordar los puntos que consideran importantes. Por mi parte, ya están preparados los que me corresponden, como, por ejemplo, reducir cuestiones rocambolescas como el abono a los agentes de la policía de la entrada al polideportivo que elijan, más aún cuando han visto incrementados considerablemente sus emolumentos tras la modificación de su complemento de puesto de trabajo. Este alcalde sigue dispuesto a negociar derechos y mejoras laborales, pero no cuestiones que rozan la definición de “privilegio”, que las hay, y bastantes, en el borrador aportado. Tenemos dos meses para acordar; yo estoy dispuesto. l
*El autor es alcalde de Estella/Lizarrako Alkatea