"Si fuera tu novio, no te hubiese permitido que fueses con esos enganches ni en la nariz ni en las orejas". "Eres muy guapa, quítate esas arandelas". Son algunas de las frases que dos hombres lanzaron a nuestra compañera María Saavedra, cuando ella se encontraba trabajando. Se trata de comentarios y actitudes que creíamos superadas. Sin embargo, tal y como hemos podido comprobar de primera mano, siguen enraizados entre algunos sectores de la sociedad.
La psicóloga Ángela Magaz, del grupo ALBOR-COHS, con quien hemos analizado lo sucedido, asegura que tenemos que tener claro que "no vamos a gustar a todos" pero también que no debemos aguantar este tipo de expresiones "autoritarias". Nos ha explicado que podemos contribuir a cambiar este tipo de actitudes, dejando claro que la persona que tiene esas expresiones "no va a ser ni mi amigo ni mi pareja".
Magaz advierte que este tipo de actitudes y expresiones no solo de personas mayores "también pueden darse en gente jóven".
La psicóloga nos ha dado además algunas pautas de cómo actuar en casos como este. "Cuando estás en una situación como esa, no es extraño que nos bloqueemos, que no sepamos qué decir o cómo decirlo. Lo que sí es cierto es que si tenemos la actitud de seguridad en nosotras mismas, de seguridad en lo que estamos haciendo, en cómo nos vestimos, en si nos ponemos piercing o no nos ponemos piercing, tenemos la predisposición para que cuando alguien nos exprese su desagrado hacia eso, nosotros siempre tengamos la respuesta de "bueno, no te gusta, a mí sí". Ya está, de manera respetuosa con la otra persona, lo contrario a lo que hace ella. Pero mostrando seguridad y autoafirmación".