Un San Juan renovado disfrutará de la segunda aventura en Segunda RFEF y lo hará con la misma ilusión y el mismo objetivo con el que lo hizo la temporada pasada: conseguir la permanencia en la categoría, una meta que costó más de lo que parece, puesto que el inicio de competición de la entidad del barrio pamplonés no fue el deseado para un recién ascendido.
Aun así, los pupilos de Bebeto supieron reponerse, adaptarse a la exigencia de la Segunda RFEF e incluso llegaron a soñar con alcanzar los puestos de promoción de ascenso, un escenario que no pasaba por las cabezas de la plantilla cuando arrancó la competición.
El cuadro de la Agrupación, que además contó con la participación en Copa del Rey, billete que ha vuelto a conseguir este curso y por lo que será uno de los 115 participantes en el torneo, se convirtió en el segundo mejor equipo de los participantes navarros la temporada pasada en la categoría, por detrás de Osasuna Promesas, equipo al que, precisamente, los de Bebeto provocaron la primera derrota del curso después de encadenar 20 encuentros manteniendo la condición de invicto.