Jaione Zubimendi y Carolina Cruz se funden en un abrazo, con el centro comercial aún humeante de fondo. Estas dos emprendedoras no acaban de asimilar que la peluquería que regentan desde hace dos años en el Centro Comercial Gorraiz, en Egüés, ya no está.
“Te vas a la cama, no puedes dormir. Y de repente a las 4.00 horas te llaman y te dicen que se ha quemado el Octógono. Piensas si es el Día de los Inocentes y vienes aquí y te encuentras con que todas tus ilusiones, toda tu lucha están en llamas”, afirma Jaione, de 51 años y natural de San Sebastián.
Según explica su socia Carolina, de 32 años y vecina de Burlada, “empezamos con el negocio después de la covid con toda la fuerza del mundo, con muchas ganas de trabajar. Es muy duro ver cómo todo el esfuerzo y la pasión que le pones se puede ir al garete en una noche. Por lo que se ve desde fuera, son todo cenizas”, lamenta. “Se veían unas llamas impresionantes cuando hemos venido por la noche”, añade.
“ ”
En la peluquería, además de Jaione y Carolina, trabajan otras dos personas y “este jueves iba a incorporarse una más, pero le hemos tenido que llamar para cancelar el contrato. Para Navidades iba a venir otra trabajadora más. Han sido dos años de mucho trabajo, de apuestas muy diferentes, un proyecto diferente, consiguiendo mucha clientela. Y de repente, toda tu ilusión y todos tus sueños, arden y te quedas sin nada”, afirma Jaione.
Las dos emprendedoras destacan que “el sector de la peluquería es muy solidario. Nos ha llamado hoy mucha gente ofreciéndonos su peluquería para trabajar, nos quieren mandar sillones desde Andalucía, material de todas partes de España... Tenemos un grupo de compañeros y de colegas que son maravillosos, porque los peluqueros somos humanos, no solamente peinamos cabellos, sino que peinamos emociones. Por eso cuando pasa algo, como cuando hubo las inundaciones, nos juntamos y somos una piña. Sólo puedo dar las gracias a todo el mundo, también a los clientes y a las clientas que han venido a darnos su apoyo y un abrazo”.