De turismo con y por la Real Sociedad. Así se puede resumir las experiencias que están viviendo y vivirán los aproximadamente 400 aficionados realistas que se desplazarán a Chipre para animar a la Real. “Probablemente uno de los destinos más al sur que podían tocar en suerte”, reconocen el célebre Oscar Parrondo, nuestro Tintín particular tras la aventura que vivió para llegar a Moldavia y que relató en este periódico.
Otro célebre seguidor txuri-urdin, Xabier Almandoz, nos contó ayer que lleva desde el viernes recorriendo la isla de Chipre: “Hemos cogido un taxi con el que estamos conociendo toda la isla. Dimitri, el taxista, es un ruso que lleva más de 20 años en Chipre y es el que nos lleva y nos trae y el que nos está enseñando y explicando todo. Es una isla con zonas muy majas. La costa es de piedra, pero bonita, con entrantes y salientes, cuevas, y hay alguna playa maja”. El panorama se asemeja al Caribe en octubre: playa y mar. “Hace calor y no hemos visto una nube desde que hemos llegado. Ahora hay unos 27 grados (son las 9.00 horas)”.
El presidente de Gure Reala luce la txuri-urdin con orgullo por la isla: “La gente te ve con la camiseta y te reconoce. Te dicen: España, Real Sociedad. La gente del Omonia está en depresión. Es el equipo más laureado de Chipre y, claro, ahora… La gente que no es del Omonia se ríe de ellos, te dice mira este, es del Omonia. Ellos dan el partido por perdido, pero, bueno, con el entrenador nuevo, a ver...”.
Desgraciadamente no van a tener mucho contacto con la Real y se van a limitar a ir al campo mañana: “El equipo viene a Lárnaca y está a 50 kilómetros de Nicosia. No vamos a ir, esperaremos al campo. La Real sabrá por qué se quedan allí, habrán encontrado un hotel bueno, yo que sé. Nicosia en cuestión de hoteles, salvo la parte nueva, que se ve que es rica, que hay mucha gente rusa y china que han elevado los precios un montón…, está bien. Me imagino que aquí fiscalmente será un paraíso o parecido”. Incluso relata que pudieron sufrir con la derrota en Valladolid en la televisión: “Nosotros vinimos el viernes y vimos el partido de Valladolid en la habitación del hotel. En el apartamento que hemos cogido, a 1.000 metros del centro de la ciudad. Resulta que en la televisión, con un cacharro, se ven todos los países del mundo, selecciono España y me aparecen desde La1 hasta todos los canales de pago que se pueden ver en España. Vimos el partido de la Real y el del Barça”.
Almandoz confía en volver con otros tres puntos: “Yo he venido a ver a la Real y con la excusa hacer turismo. Viendo la situación, creo que el partido más importante es el domingo. Me imagino que no hay entrenador del mundo que salga a perder. La Real buscará la victoria con los que jueguen. Al Omonia creo que le ganamos con un equipo medio, con cinco no titulares. Yo creo que vamos a ganar y al Betis también”. Su porra es optimista: “Un 0-2”.
Entre el Omonia y el Betis
A Óscar Parrondo le sorprende en la playa nuestra llamada: “No había un sitio mejor que esté en el sorteo”, bromea. El donostiarra confía en llegar a tiempo a ver al Betis en Anoeta: “¿Puede haber huelga?”, pregunta. “Volamos desde Lárnaca, dormimos en Bérgamo y calculamos llegar a Anoeta a las 20.50 horas”.
Chipre les está sorprendiendo: “El agua del mar es una maravilla. La isla se divide en dos. Llegamos por la noche y tuve que conducir con el volante en la derecha por carreteras no muy buenas. Bastante emocionante”. No debió asustarse demasiado un hombre que ha vivido más aventuras que Tarzán: “Yo quiero ir a la zona norte, que es la parte turca (la otra se denomina la zona griega), pero los que nos alquilaron el coche nos han dicho que si nos damos un golpe, no nos lo cubren, y mis amigos prefieren no ir”.
La anécdota del día de ayer es que mientras paseaban por la playa con una mochila de Aurten Bai “se nos acercó una chica y nos preguntó si éramos de la Real. Era la mujer de Mikel González. Encantadora, nos dijo que cualquier cosa que necesitásemos les dijésemos. Luego fuimos a las instalaciones del AEK Larnaca para saludarle. Nos comentó que le daba pena no poder ir al partido, pero es que ellos se enfrentan al Dinamo de Kiev. Eso sí, pensaba acercarse al hotel para saludar, entre otros, a Xabi Prieto”, que sabe que se desplaza con la expedición oficial. “Es el único de mi generación que viene, imagino”, les dijo.
Lo que es seguro es que la Real tampoco estará sola en Nicosia. Y los que van, seguro que no olvidarán jamás el cegador sol de octubre chipriota. Casi como en el Caribe...