El Ayuntamiento de Sestao no para por Navidad. De hecho, las últimas jornadas han sido muy intensas en cuanto a reuniones y tramitaciones se refiere en un municipio que mira al futuro con ilusión gracias a una apuesta clara por el turismo industrial, la ejecución de un buen número de proyectos y una revisión del PGOU en el horizonte. “El mundo está cambiando y Sestao también debe emprender ese cambio”, asegura Ainhoa Basabe, la alcaldesa de la localidad sestaoarra.
Acaba de comenzar 2023 y es momento de mirar atrás. ¿Qué balance hace del año 2022?
El balance es positivo, pese a todas las dificultades que hemos tenido por el descosido que nos ha hecho la pandemia a la hora de poder sacar adelante proyectos que teníamos pensados ir haciendo a lo largo de toda la legislatura y que tenemos que intentar poner en marcha en tan solo dos años. Hemos impulsado proyectos que son estratégicos para Sestao y se están haciendo inversiones muy fuertes gracias a las aportaciones de otras instituciones. Tenemos cerca de 60 millones en inversiones en obras como, por ejemplo, la mejora de la depuradora de Galindo que va a mejorar la calidad de vida de los y las sestaoarras, la puesta en valor del Horno Alto, la ejecución de las 180 viviendas en La Punta, hace unos días ha salido la licitación del parque que unirá la parte trasera de Txabarri con Orixe 6... Hay muchos proyectos que están ahora en pleno auge por el parón que creó la pandemia.
Todos estos proyectos muestran que Sestao es un ejemplo de colaboración interinstitucional.
Solo con los fondos municipales sería inasumible hacer todas las actuaciones que se están llevando a cabo y que Sestao avance al ritmo que lo está haciendo. Casi la totalidad de los ingresos municipales se evaporan con el gasto corriente y para hacer inversiones nos quedaría muy poquito presupuesto.
Un ejemplo de esos proyectos interinstitucionales es todo lo relacionado con la puesta en valor del Horno Alto, proyecto al que se ha dado un impulso muy importante en 2022.
El año 2022 ha sido muy importante en este proyecto y 2023 también lo será. Estamos dando aún los primeros pasos y partimos de que Sestao no tenía nada dedicado al turismo. De hecho, era impensable para muchas personas, entre las que me incluyo, que nuestro municipio fuese un tractor turístico y que atrajese visitantes. Tenemos que abrir y explorar esa vía como hace algunos años lo hizo Bilbao y que tanto éxito le ha dado, tenemos que mirar al futuro con ilusión y querer algo más. Está claro que la industria ya no va a tener el potencial de antaño y eso hace que debamos buscar otras alternativas en campos como la innovación, la digitalización... El mundo está cambiando y Sestao también debe emprender ese cambio.
¿Qué hizo que Sestao cambiase el chip y viese el turismo como algo a potenciar?
La Agenda 2030 tiene parte de responsabilidad. Nos sentamos a mirar a futuro y pensamos que por qué no apostar por el turismo industrial. Hemos empezado a trabajar en ello y a dar los primeros pasos para que en un futuro no muy lejano esté consolidado. Esta apuesta es algo conjunto, no solo de Sestao y tenemos que hablarlo entre varios municipios. Ya hemos hablado la alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo, y yo sobre esta cuestión porque compartimos inquietudes. Si actuamos solo como municipios, no vamos a ninguna parte, por nosotros mismos no podemos hacer que el turista esté todo un día. Si ofrecemos todo a nivel comarcal sí podremos hacerlo y ya vienen con un itinerario hecho. Hay que tener esa visión y trabajarlo con una institución supramunicipal. Ya estamos manteniendo conversaciones con la Diputación para llevar a cabo un proyecto conjunto de comarca.
Así que el propósito es que a lo largo de este nuevo año haya una hoja de ruta turística conjunta para Ezkerraldea y Meatzaldea.
Sí, en eso estamos trabajando y esperamos que vea la luz.
El Ayuntamiento de Sestao, por su parte, acaba de aprobar su Plan de Turismo. Supongo que será una herramienta importante dentro de esta nueva apuesta por el turismo industrial que está realizando el municipio.
Sí, el Plan de Turismo, es algo esencial porque si queremos hacer un proyecto más grande a nivel comarcal, debemos tener esta hoja de ruta como base. Una base en la que se recoja no solo los atractivos con los que contamos, las infraestructuras que tiene Sestao y cómo se implicaría al comercio, la hostelería y las asociaciones de Sestao. Es un documento que debemos tener para poder optar a subvenciones a nivel foral y europeo, por lo que es obligatorio tenerlo para poder seguir dando pasos para consolidar la apuesta por el turismo industrial.
Este plan establece tres ejes para potenciar el turismo industrial: el Horno Alto, el Camino de Santiago y la cultura y el deporte.
Así es, pero este es un documento vivo y abierto. Se pueden ir añadiendo cosas nuevas y explorar nuevas vías así como se pueden eliminar aspectos que se vea que no funcionan.
Además de potenciar el turismo industrial, a través del mismo se pretende generar más actividad económica y empleo en Sestao. ¿Qué tasa de desempleo hay actualmente en la localidad?
Actualmente tenemos una tasa de desempleo del 15,71%, estamos en los índices de paro más bajos en muchos años. Esperamos que en estos meses con la puesta en marcha de los Planes de Empleo bajemos esa tasa un poquito más. La creación de empleo es algo importantísimo para nuestro municipio y en ese futuro que estamos diseñando también lo será. Ibarzaharra ya está acogiendo un buen número de proyectos ligados a la logística, en la zona de La Naval se van a asentar muchos proyectos de industria pesada, hemos pedido a otras administraciones un impulso para llenar las últimas parcelas de Sestao Bai... Todo ello va encaminado a generar actividad económica y empleo en nuestra localidad, ya sea mediante la industria, el turismo... Debemos tratar de ofrecer diferentes perfiles de empleo para que la mayor cantidad de sestaoarras puedan estar ocupados.
Sestao ha dado los primeros pasos para la transformación de todo el entorno de Camino Txikito. ¿Es uno de los proyectos más ilusionantes para el municipio?
Es un proyecto muy ilusionante que sí es verdad que llevamos arrastrándolo mucho tiempo y que se presentó en otras legislaturas, pero todas las cuestiones urbanísticas son muy laboriosas, más cuando hablamos de parcelas tan antiguas. A día de hoy, estamos con la depuración y registro de las fincas. Hay algunas que se nos resisten porque no encontramos a los propietarios y estamos recurriendo a fichas urbanísticas del siglo XIX. Estamos buscando propietarios de las parcelas, sus lindes... Esperamos terminarlo a lo largo de este año para ya poder trabajar en la zona. Es un proyecto muy importante porque es una zona que está en pleno centro del municipio, un punto que conecta Txabarri con el Kasko... Va a ser un impulso muy importante para Sestao.
Otros dos proyectos que no están siendo fáciles son la mejora de los campos de Galindo y el de Alameda Las Llanas.
El tema de los campos de fútbol de Galindo salió a licitación por primera vez pero quedó desierto, entonces se incrementó el presupuesto para hacer frente al alza de los costes de la construcción y se volvió a sacar a licitación pero no se puede adjudicar todavía porque el Colegio de Arquitectos ha presentado un recurso y ahora el OARC (Órgano Administrativo de Recursos Contractuales) tiene que emitir un fallo. En cuanto a la Alameda Las Llanas, han presentado el proyecto básico en el Ayuntamiento y el arquitecto les ha pedido hacer unas correcciones. Estamos esperando a que lo solventen y lo vuelvan a presentar junto con el proyecto de ejecución para sacarlo a licitación.
En materia urbanística, este año se iniciará la revisión del PGOU.
Es un reto importante que encaramos porque supone diseñar el Sestao del futuro. El plazo de presentación de ofertas acabó la semana pasada, se presentaron dos ofertas y ahora los técnicos las tendrán que estudiar y valorar. Esperemos que el contrato esté listo para marzo y empezar a trabajar ya en la revisión.
Con esta renovación, darán un paso más hacia la modernización de Sestao.
Con esta revisión debemos adaptar Sestao a los tiempos actuales y prever las actuaciones futuras como, por ejemplo, Camino Txikito, la zona de Las Canteras, parte de la Vega Galindo... Hay mucho trabajo por delante y será una labor a medio plazo porque una revisión del PGOU se culmina en un plazo mínimo de cuatro años. Así que es un trabajo de cuatro a ocho años el que vamos a iniciar en los próximos meses.