El aeropuerto de Tombuctú, situado en el norte de Mali y adyacente a una base de la ONU, fue atacado con obuses este miércoles en una acción reivindicada por la organización yihadista Al Qaeda.
Según informaron a EFE fuentes locales, al menos cuatro proyectiles cayeron sobre la zona aeroportuaria de la ciudad, junto a la que se ubica la base de la misión de la ONU en Mali, la Minusma, que se está retirando del país a petición de la junta golpista en el poder.
La misión se ha retirado ya de cuatro bases en las zonas más remotas de Mali, según un calendario que prevé que a fecha 30 de septiembre sólo queden abiertas tres, entre ellas la de Tombuctú, que tiene que estar cerrada antes del 31 de diciembre.
Tras el ataque, del que se desconocen aún los daños materiales o humanos, se ha cortado el acceso al aeropuerto y se espera que las Fuerzas Armadas emitan un comunicado en las próximas horas.
El Grupo de Apoyo al Islam y a los Musulmanes (JNIM, por sus siglas en árabe), filial de Al Qaeda en la región, reivindicó el ataque en un comunicado difundido por su agencia de propaganda Az-Zalaqa, al que tuvo acceso EFE.
En la nota, el grupo terrorista afirma que ha bombardeado el aeropuerto, que "se había convertido en un refugio para la banda de mercenarios Wagner", en referencia al grupo vinculado al Kremlin que actúa en Mali a petición del gobierno golpista, y de "los soldados de (Assimi) Goita", el militar al mando de la junta militar maliense.
El norte y el este de Mali, una zona conocida como el Azawad y que ocupa dos tercios de este país del Sahel, están gobernados de facto por los grupos secesionistas (muchos de ellos tuaregs) bajo una creciente presión yihadista.
El comienzo de la retirada de los cascos azules de la ONU, el único organismo que vigila el alto el fuego en la región tras una guerra desatada en 2012 entre los independentistas y el Gobierno central, ha aumentado la tensión entre estas dos partes, lo que hace temer un nuevo conflicto armado en la zona.