Álava, destino turístico también para los alaveses

"El pantano de Garaio es nuestra vida. No nos hace falta salir fuera para disfrutar del verano y desconectar del estrés diario". Con estas palabras, Patricia, acompañada de su hija Elena, asegura que ella esté año no piensa viajar fuera de Vitoria porque a pocos kilómetros de su casa tiene lo que necesita.

Su opinión y testimonio no representan un caso aislado. Este año son muchas las familias que han optado por convertir Vitoria y el territorio alavés como destino turístico. Prueba de ello son las imágenes que dejan los pantanos del territorio y las piscinas de Mendizorrotza y Gamarra, con aforos completados y llenas de familias disfrutando del verano en Vitoria.

DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA visita el pantano de Garaio para conocer los planes de verano de los alaveses.

Un sitio perfecto para desconectar

Una amplia agenda cultural que hace disfrutar a niños y mayores, las piscinas de Mendizorrotza y Gamarra con un aforo casi completo los días de sol y los pantanos del territorio completan la agenda de todas las familias que este año han decidido pasarlo, especialmente, en el territorio alavés. Detrás de esta decisión no se esconde el miedo a viajar por la pandemia, si no las propias oportunidades de ocio y descanso que se encuentran a pocos kilómetros de la ciudad.

Este es el caso de Jesús y Marisa, una pareja gasteiztarra jubilada que tiene su espacio casi reservado en el pantano de Garaio. Entre bromas aseguran que, tienen incluso un árbol marcado, para que les recuerde que ese espacio está reservado.

Día tras día acuden al pantano de Garaio dispuestos a hacerse una jornada completa bajo el sol. "Si queremos darnos un chapuzón, tenemos agua. Si se pone a llover o nos aburrimos, a pocos kilómetros está nuestra casa. Desde donde estamos vemos el coche, y podemos traernos la mesa y la comida y lo que nos haga falta porque también hay zonas de sombra. Es un sitio perfecto para desconectar y descansar. Esta es la joya de los alaveses", dice Marisa.

Jesús, sentado en la tumbona de al lado, mientras sujeta el palo selfie para inmortalizar su verano 2021, responde que "el anterior año este pantano nos dio la vida". "Venir aquí nos salvó la vida. Fue un año muy duro para toda la sociedad, y nosotros nos pasamos el verano entero aquí, relajándonos a pocos kilómetros de casa. Este año hemos decidido hacer lo mismo, aunque el tiempo no nos está acompañando. Pero en cuanto sale el sol, cogemos el coche y nos sentamos siempre en esta misma zona. Esto es un placer de la vida", dice.

Varias personas pasean por el pantano de Garaio. Foto: Josu Chavarri

Cerca de ellos, Patricia y su hija Elena, junto a Mónica y su hijo Ander, colocan las toallas y la tienda de campaña con mucho mimo y detalle. Ander se protege del calor refugiado bajo la sombra que le ofrece esa tienda de campaña y Patricia lo hace dándose un chapuzón.

"¿Para qué salir del territorio? No tengo ninguna necesidad. Nosotros nos pasamos el verano aquí y los críos disfrutan muchísimo. Estamos en plena naturaleza, sin agobios, con máxima relajación€ no echo de menos la necesidad de preparar un viaje y salir fuera", dice Patricia. Añade, además, que los días que más disfrutan del pantano son entre semana ya que, evidentemente, los fines de semana tienden a llenarse más.

Reconoce asimismo que, desde el inicio de la pandemia, el aforo es más reducido por lo que los fines de semana la Ertzaintza cierra la entrada antes para no sobrepasar el aforo y poder respetar en todo momento el distanciamiento social obligatorio como medida preventiva, por lo que tampoco hay "excesivamente" gente. "Venimos aquí todos los días que podemos y estamos hasta que nos cansamos. Tomamos el sol, nos damos un baño, jugamos y descansamos. No nos hace falta más. Y todo esto sin salir casi de casa", dice.

Diversión también con amigas

Desconexión en solitario, relax con los hijos o diversión con los amigos. Las imágenes que se obtienen en una jornada en el pantano son diversas. Mientras Patricia y Mónica cuidan los detalles que llevarán al confort a esta familia, Ruth hace de anfitriona para sus amigas.

Ella es gasteiztarra, vive a pocos kilómetros del pantano de Garaio y, aunque reconoce que suele acudir a otros pantanos como el de Landa, para presumir de playa y territorio lleva a sus amigas Maider (de Bilbao) y Naia (de Donosti) a la playa de Garaio. "Hoy venimos aquí desde todo Euskadi", bromea.

"He decidido traer a mis amigas aquí porque me parece un sitio súper bonito, con mucha calma, con muchas oportunidades de diversión y porque, en general, me parece un pantano muy bonito", dice Ruth. Naia y Maider afirman con la cabeza: "Es un sitio muy bonito, la verdad. Bilbao también ofrece oportunidades porque cerca de la ciudad tenemos diferentes playas, pero me parece un sitio muy tranquilo y diferente", dice Maider.

Un grupo de personas disfrutan del día en el pantano de Garaio. Foto: Alex Larretxi

Y a poca distancia de ellos, una última familia confirma también que para ellos Vitoria y Álava es el destino elegido para las vacaciones de este año. Es el caso de la familia de Laura y Gonzalo, junto a su hija Maren e Imanol.

Según aseguran, esta familia tiene una agenda repleta de actividades y diversión, sin necesidad de salir del territorio. "No paramos quietos. El plan que más nos gusta es venir aquí; estamos alejados de la gente, y encima descansando mientras nuestros hijos se lo pasan bien", dice Gonzalo.

"No nos hace falta más, el pasado año también lo hicimos así, desde que empezó la pandemia del coronavirus, y lo cierto es que nos hemos dado cuenta de que en Vitoria también nos lo podemos pasar genial", concluye.