Una vez pasada la euforia del Benidorm Fest y la final del sábado, en la que Blanca Paloma se alzó como ganadora con su tema 'EAEA', toca analizar todo lo que no se vio del concurso pero que ahora, poco a poco, va saliendo a la luz. Para ello, En Onda Vasca con Txema Gutiérrez hemos contado con un testigo de excepción, nuestro colaborador Alberto Guzmán, que ha formado parte del equipo de RTVE que ha analizado las dos semifinales y la gran final.
Notoria ausencia
Uno de los 8 finalistas no acudió a la fiesta que se celebró tras la gala del pasado sábado. Se trata del tinerfeño Agoney, uno de los grandes favoritos para alzarse con el micrófono de bronce del Benidorm Fest. El intérprete de 'Quiero arder' tuvo que conformarse con el segundo puesto...y el resto de concursantes terminaron la noche sin él. Alberto Guzmán resume así su propuesta: "Me parece una voz excepcional, un tío súper trabajador. Creo que hicieron una propuesta brutal, pero creo que es una persona con muy mal perder y con muy malas pulgas".
No hubo 'Chanelazo'
Había expectación por volver a ver a Chanel interpretar 'Slomo', el tema con el que ganó el Benidorm Fest de 2022 y quedó tercera en Eurovisión, pero los asistentes se quedaron con las ganas. La catalana sí subió al escenario, pero fue únicamente para entregar el micrófono de bronce a Blanca Paloma. Sólo los asistentes a la fiesta posterior pudieron escuchar un trocito del tema que la catapultó a la fama. Alberto Guzmán comparte: "La sensación con la que me he quedado es de que está demasiado hinchada. Tengo la sensación de que los directivos que le están llevando la carrera la tienen entre algodones y no de un modo correcto".
La gran sorpresa de la noche
La dio la malagueña Ana Mena, una de las artistas del momento, que actuó como invitada en la gala final y también acudió a la fiesta después: "Estuvo en la fiesta como una más, con vaqueros y camiseta. Pudimos hablar todos con ella y le dije que tendría que presentarse al Benidorm Fest. Me dijo que no descarta nada, pero que ahora está en un momento en el que no para de trabajar. Una tía excepcional", concluye Alberto.