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Goiuri Zabaleta (Leitza, 2009) se palpa las protecciones de la mano derecha y se dirige hacia el frontis el frontón Las Llanas de Sestao. “No es muy habitual que las pelotaris vengan a las presentaciones con los tacos”, reflexiona Iker Amarika, uno de los máximos responsables del Master Laboral Kutxa del Cuatro y Medio. La respuesta la da la propia pelotari navarra: “Voy a aprovechar para pelotear y tomar medidas. Nunca he jugado aquí”. La cancha de Ezkerraldea se erige este domingo como escenario en el que se plasmarán todos sus sueños en busca de su primera txapela de la jaula femenina (12.00 horas).
La cuestión es que enfrente tendrá a Amaia Alday, tres veces campeona de la modalidad consecutiva y su verduga en la edición de la pasada campaña. Repiten final. El Ezkurdi de Durango se vistió de lujo en 2023 y la dimoztarra se llevó el gato al agua por 22-13.
“Amaia es una pelotari muy buena. Será muy complicado hacerle frente”, describe Zabaleta, quien reflexiona que “no es casualidad que Alday tenga tres txapelas. Ella es la que tiene la presión. Voy a salir a hacer lo mío. Siempre hay esos nervios de la final”. Lo que está claro es que la leitzarra ha subido escalones en la última campaña. No en vano, desde verano se ha coronado en Hiru Hiriburuak, El Antiguo y San Mateo, mientras que quedó subcampeona en Plazandreak. “El objetivo es evolucionar. He visto que este año he mejorado y me he visto arriba. Llevo una temporada muy buena. Estoy jugando muy a gusto. A ver si ganamos la final”.
Referente con quince años
Con apenas quince años, la delantera navarra se ha convertido en uno de los grandes referentes. “No me fijo mucho en lo que sucede a mi alrededor. Yo me centro en mi camino, en la pelota, en disfrutar. Si vienen las txapelas, mejor”, especifica, mientras que advierte que “no siento presión todavía. Este año tenía la necesidad de repetir final en el Cuatro y Medio, pero todavía me queda mucho para tener esa presión”. “Desde que era pequeña quería llegar arriba. Espero mantenerme entre las mejores pelotaris”, manifiesta Zabaleta. Su explosión, no obstante, está siendo brutal, con su consiguiente contagio en una localidad en la que la pelota es prácticamente religión. “El año pasado se apuntaron muchas niñas y por ahora siguen unas cuantas”, comenta.
Sobre la final de este domingo, entretanto, la leitzarra explica que “Alday tiene más pegada, más fuerza. Le gusta tirar ganchos y tiene una gran habilidad. A mí me va más el juego rápido de dejadas. Habrá una bonita pelea”. “Me gustan los partidos con las gradas llenas. Me crezco”, certifica Goiuri.
“Aguantar el partido”
Por otro lado, Amaia Alday cuenta con el cartel de principal favorita al cetro. “Lo soy por haber ganado tres txapelas, no por cómo estoy de juego. Goiuri ha demostrado muchísimo. Tiene muchos motivos para estar contenta”, reflexiona la pelotari vizcaina, que lanza flores a su contrincante: “Pese a su juventud, Zabaleta tiene mucha experiencia. No ha sufrido el parón porque no había pelota femenina como nos tocó a nosotras. Es joven, pero domina la técnica y la fuerza. Su margen de mejora es más grande que el mío simplemente por la edad. Ha crecido mucho desde el año pasado, mientras que yo me he mantenido en mi línea”.
En ese sentido, uno de los grandes valores de Zabaleta es “mantenerse fría”. Tanto ella como Laia Salsamendi o Enara Gaminde capitanean la nueva hornada de la pelota a mano femenina. “Son muy completas. El resto hemos sido todoterrenos por el mero hecho de haber tenido que dejarlo por otros deportes. Ellas han mamado la pelota y eso se nota”.