Alec Peters ya cuenta los días para su regreso a la cancha. El ala-pívot baskonista, que no ha podido disputar todavía ningún partido oficial esta temporada, fue ayer intervenido con éxito en Chicago de su lesión meniscal en la rodilla derecha, operación que llevó a cabo el especialista Brian J. Cole, y su rehabilitación durará entre seis y siete semanas, según ha indicado el club en el parte médico oficial.
Por lo tanto, si todo va bien para el jugador norteamericano y cumple con los plazos estimados por la entidad, Dusko Ivanovic debería poder tenerlo de nuevo a sus órdenes hacia finales del mes de diciembre, alrededor de la 15ª jornada de la ACB y la 17ª de la Euroliga, en el comienzo de la segunda vuelta del torneo. Se trata de un periodo de recuperación esperable para este tipo de lesiones, ya que el menisco no se regenera y la rehabilitación se centrará en en recuperar la movilidad de la rodilla y reforzar los músculos de la zona con el objetivo de prepararlos de nuevo para la competición.
Este escenario genera un mar de dudas para el Baskonia, ya que permite contar con una fecha estimada para el regreso a la cancha de uno de sus mejores jugadores, pero a la vez le hace tener la certeza de que se perderá alrededor de una quincena de partidos, lo que podría condicionar la temporada. En consecuencia, el club deberá decidir si mantiene el equipo con las piezas con las que cuenta actualmente en nómina a la espera de que Peters pueda reincorporarse al trabajo a finales de año o si se mueve en el mercado para contratar un cuatro que permita afrontar con mayores garantías este tramo de la campaña y cubrir la ausencia del norteamericano. En caso de decantarse por la segunda opción, eso sí, deberá buscarla en el mercado de jugadores europeos y africanos, ya que la plantilla tiene ya cubiertas las dos plazas de extracomunitario con Wade Baldwin y el recién contratado Lamar Peters.