Los Gobiernos de Francia, Alemania y Reino Unido han denunciado este sábado al unísono las últimas medidas adoptadas por Irán para expandir su programa nuclear. El Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) afirmó este viernes que Irán ha instalado más centrifugadoras de enriquecimiento uranio en sus instalaciones de Fordo y Natanz, después de que Teherán prometiera responder a la resolución de condena aprobada la semana pasada por la Junta de Gobernadores del organismo por la falta de cooperación con la agencia.
"Irán informó el 10 de junio a la agencia que sus planes para instalar 18 cascadas de centrifugadoras de IR-2m en Natanz", ha manifestado, antes de desvelar que Teherán ha informado también a la agencia de que instalará ocho cascadas con centrifugadoras IR-6 en Fordo "durante las próximas tres o cuatro semanas", de acuerdo con la agencia de la ONU.
Nueva escalada del programa nuclear
A juicio de Berlín, Londres y París, estas medidas adicionales "vacían de contenido" al acuerdo nuclear internacional firmado en 2015 pero inutilizado desde 2018, cuando el entonces presidente de EEUU, Donald Trump, decidió desvincularse de forma unilateral del pacto.
"Estas medidas aumentarán aún más las capacidades de uranio enriquecido y las capacidades de enriquecimiento de Irán, cuyos niveles ya han superado los límites establecidos, y una nueva escalada del programa nuclear de Irán, que conlleva importantes riesgos de proliferación", indican.
"Seguimos comprometidos con una solución diplomática que impida a Irán desarrollar un arma nuclear", remachan los tres países.