Actualizado hace 3 minutos
El Gobierno de Alemania ha decidido prolongar otros seis meses más, hasta el 15 de septiembre, los controles de vigilancia impuestos en septiembre en todas sus fronteras, bajo la premisa de intentar combatir la inmigración irregular y potenciales amenazas terroristas.
"Con los controles fronterizos, estamos haciendo retroceder de manera efectiva la inmigración irregular", ha destacado el canciller, Olaf Scholz, que se la juega dentro de semana y media en unas elecciones generales precedidas precisamente por un encendido debate sobre el endurecimiento de la política migratoria.
Entradas no autorizadas
El Ministerio del Interior ha confirmado la detección de unas 80.000 entradas no autorizadas y ha cifrado en 47.000 los rechazos en frontera, debido por ejemplo a la falta de documentación. Además, las autoridades han detenido a 1.900 personas por presunto tráfico de personas.
Scholz ha confirmado que Berlín ya ha confirmado la prórroga de los controles a la Comisión Europea, garante última del acuerdo que permite la libre circulación en el espacio Schengen. Este bloque autoriza a sus miembros a establecer controles, siempre y cuando sea de manera extraordinaria y temporal.
En el caso de Alemania, los controles están en vigor en la frontera con Austria desde 2015 y en los cruces con Polonia, la República Checa y Suiza desde octubre de 2023. La medida adoptada en septiembre implicó ampliarlos también a los límites con Dinamarca, Países Bajos, Bélgica y Luxemburgo.