El alpinista vizcaino Alex Txikon, tras tres semanas de aclimatación, ha arrancado #AnnapurnaColdPeaks, el proyecto con el que pretende hollar en invierno astronómico y sin oxígeno artificial la cima del Annapurna (8.091 metros), la décima montaña más alta del planeta. Tras alcanzar la cima del Manaslu (8.163 metros) el pasado 6 de enero, tratará de conquistar la cima del Annapurna, que no ha sido coronada desde 1987 por una expedición puramente invernal.
Según ha informado su equipo, Txikon partió el 20 de diciembre en dirección al Campo Base de la vertiente norte del Annapurna que se encuentra a 4.200 metros, para comenzar este viernes -justo al inicio del invierno astronómico- con el proyecto #AnnapurnaColdPeaks.
Un año más harán equipo con Txikon seis experimentados escaladores nepalíes Chhepal, Ang Gyalu, Passan Nurbu, Magkpa, Mig temba, Lakpa y Pemba. Como novedad, este año se suma a la cordada el alpinista italiano Mattia Conte, así como Andrés Navamuel, fotógrafo y alpinista, quien ha estado recientemente en el treking del Khumbu. Mientras en el campo base estará el equipo de apoyo encabezado por Eneko Garamendi, persona de máxima confianza de Txikon.
Txikon partió de Bilbao el pasado 29 de noviembre y desde entonces se ha centrado en aclimatarse alcanzado cotas de casi 6.000 metros en varios trekkings (Thorong la Pass, Chulu Far East) y pernoctando a 5.000 metros como en el Campamento Base del Chulu. Actualmente se encuentran en el campo base, tras subir andando durante cerca de tres horas desde Bhusketmeia. Así, una vez en el campo base, ya han procedido a montar las tiendas y a hacer acopio de lo necesario para la subida.
"Nos encontramos contentos y muy motivados. Temperaturas extremas, viento de más de 70 km/hora y mucha nieve. Es sabido que las expediciones invernales son muy complicadas y, por lo tanto, nuestro objetivo es comenzar a ascender lo antes posible", ha indicado Txikon.
Una vez en el campo base, poco a poco comenzará a ganar altura. "Sin muchos más preámbulos, comenzaremos a trabajar en la montaña, empezaremos a jugar en ella, que es a eso a lo que hemos venido", ha dicho.
A medida que el tiempo avanza, la climatología se complica, y es que las condiciones más adversas suelen darse durante los meses de enero y febrero. Por ello, el alpinista tratará de atacar la cima del Annapurna la última semana de diciembre por la ruta de la cara norte que los franceses Maurice Herzog y Louis Lachenal emplearon en 1950.
"Los próximos días y semanas veremos hasta dónde llega nuestra experiencia, entremezclada con la fortuna y nuestra motivación, todo ello marcará el devenir de nuestra expedición", ha dicho Txikon.
Del Campo base saldrán hacia el C1, pasando por sus rampas, las cuales conducen al mencionado C1 a unos 5.700 metros de altura.