Los jóvenes han sido los principales protagonistas del acto institucional que ha tenido lugar esta tarde en el Palacio Euskalduna de Bilbao con motivo de la celebración del Día de la Memoria y que ha estado presidido por el lehendakari Iñigo Urkullu.
Bajo el lema ‘Un futuro con memoria. ¡Queremos saber!’, en el encuentro que todos los años organiza Gogora han participado, entre otros, 40 docentes y 70 alumnos y alumnas de 13 centros se secundaria de Euskadi, la UPV y la Universidad de Deusto, junto a representantes institucionales, víctimas y agentes sociales.
La transmisión de la memoria ha sido el eje central y se ha querido poner el foco en una generación que exige tener conocimiento de lo ocurrido en nuestro pasado reciente. El acto ha arrancado con la proyección de un vídeo en el que alumnos y docentes del programa para la transmisión de la memoria Adi-adian reflexionan sobre lo que sabían o desconocían y lo que han aprendido durante este curso sobre los sucesos más traumáticos de la historia reciente en Euskadi. “Todos deberíamos saber lo que ha pasado porque al final somos el futuro y lo último que queremos es que vuelva a pasar algo así”, dice una alumna en el vídeo. Gracias a Adi-adian, muchos de estos jóvenes han tenido conocimiento de los crímenes de ETA y del GAL.
Urkullu: “Nuestra memoria debe ser crítica”
En su intervención, el lehendakari destacó que gracias a Adi-adian cerca de 35.000 estudiantes han vivido “la experiencia de escuchar y reflexionar con personas que han sido víctimas”. A su juicio “son ejemplos de iniciativas y herramientas” que buscan “fomentar una actitud crítica frente al terrorismo y la violencia; reforzar principios y valores éticos y democráticos” porque “memoria significa también atender a las víctimas: verdad, justicia, reparación y garantía de no repetición”. “Las víctimas, todas y cada una de las víctimas, sois testimonio vivo de la historia de Euskadi”, apostilló.
Urkullu añadió que “la memoria reciente debe poner en valor el esfuerzo colectivo por construir un país que es hoy referencia en desarrollo humano sostenible” e instó a tener “muy presentes las experiencias traumáticas de terrorismo y violencia política que hemos conocido”.
En este sentido, recordó que “estamos construyendo el futuro de un país en el que se asesinó, se amenazó, se coaccionó y se extorsionó en nombre de una idea y un proyecto político. Un país al que ETA lastró e impidió volar libre. Un país que, sufrió también el terrorismo parapolicial y de extrema derecha; la denominada ‘guerra sucia’ y la tortura forman parte, lamentablemente, de la crónica negra de Euskadi”.
La trasmisión de esta memoria crítica con nuestro pasado reciente es, en palabras de Urkullu, “tarea de todos y todas, de las instituciones, de las fuerzas políticas, de los agentes sociales, de las familias, de los medios de comunicación y también de la escuela y la Universidad, por eso vuestra presencia aquí, para recordar la importancia de educar en valores”.
Por último, aprovechó la ocasión para recordar a Iván Illarramendi, el vasco asesinado por Hamás en Gaza junto a su esposa Dafna Garcovich. “Queremos construir un mundo sin víctimas, se lo debemos a ellos", sentenció.