"Está siendo duro, no te voy a engañar, está siendo muy duro". Son las palabras de Joseba Novoa, la pareja de Amaya Zabarte. Desde el 5 de marzo viven una pesadilla. Esa tarde, la mujer recibió un impacto en el entorno de Anoeta, mientras buscaba "cobertura para descargarse la entrada para el partido" entre Real Sociedad y PSG. Amaya llegó a entrar en el estadio, pero minutos después comenzó a sentirse mal y fue trasladada al Hospital Donostia donde tuvo que ser ingresada en la UCI.
"Amaya está convaleciente, tiene para tiempo", relata Joseba a Onda Vasca. "Sufre muchas cefaleas" y el golpe le provocó problemas de memoria y fluidez en el habla. "Sabe pensar palabras pero no sabe decirlas". A ello, se añade que "no puede salir sola a la calle, depende de terceras personas, y no puede conducir". Por ello, asegura Joseba, "su estado anímico es bajito porque tiene miedo de cómo va a quedar".
"Está dolida por todo lo que está sucediendo" ya que al daño físico y anímico ahora se han sumado "las trabas judiciales que son la gota que colma el vaso". La jueza encargada del caso ha decidido sobreseer la causa alegando que no hay autor conocido. La familia de la víctima, sin embargo, pide que se continúe investigando y presentarán recurso ante la Audiencia de Gipuzkoa para mantener vivo el proceso judicial.
"Desconocemos si fue un accidente o fue una negligencia y era lo que queríamos investigar. Lo que ya me resulta muy, muy extraño es la forma de proceder de la justicia y de la policía", apunta Joseba quien añade que "no han movido un dedo, ni tan siquiera le han interrogado a Amaya para saber qué es lo que vio, lo que vivió y que la justicia no abra diligencias para que la familia podamos intentar descubrir qué es lo que ha sucedido.... toda esa oscuridad que estamos viendo alrededor, pues la verdad es que te surgen muchas dudas de lo que ha ocurrido".
Sin acceso a las imágenes de esa noche
Joseba denuncia que, a pesar de existir varias denuncias sobre lo ocurrido esa noche, la jueza encargada del caso, Ana Isabel Pérez Asenjo, no ha abierto diligencias de ninguna "salvo de disturbios y desórdenes públicos". Pero, nos explica, en este caso no hay imputados y, por lo tanto, "no hay ningún abogado que pueda pedir las imágenes ni pedir declaraciones".
Cree que lo que está ocurriendo es algo que denomina "ingeniería judicial", es decir, una forma "de ganar tiempo". Mientras, a la familia de Amaya Zabarte no les han facilitado la posibilidad de ver las imágenes grabadas la noche en que la mujer recibió el impacto ni han tomado declaración a la propia Amaya.
Instiste Joseba en que "si no se abren diligencias, no podemos acceder a las imágenes de ese día. Entonces, no podemos demostrar nada ni limpiar la imagen de Amaya". En este sentido, Joseba subraya que "algo que nos ha enfadado a la familia son las últimas declaraciones que hizo el señor Erkoreka (el consejero de Seguridad), diciendo que el día que pasó lo de Amaia estaban lanzando botellas, piedras y demás". Considera que las imágenes les podrían ayudar a demostrar que "donde estaba Amaya que era en los aledaños del estadio, en la carretera que está enfrente del estadio, en ese momento no había ni lanzamiento de botellas, ni lanzamiento de piedras ni nada por el estilo". Por eso, Joseba lamenta que "dejaba entrever como que era una negligencia de mi mujer y, claro, eso nos enfadó bastante porque no... estaba mintiendo, no estaba diciendo la verdad".
Seguridad afirma que "la investigación sigue abierta"
Onda Vasca se ha puesto en contacto con el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco quien confirma que "se abrió una investigación por parte de Asuntos Internos" para esclarecer lo ocurrido, investigación que "sigue abierta". Aseguran que "se están reconstruyendo los hechos con la policía científica, se está tomando declaración a testigos, afectados, agentes y haciendo la trazabilidad del material antidisturbios utilizado", entre otras cuestiones.
Sobre las imágenes grabadas de los incidentes, nos confirman que "se han hallado imágenes del momento del impacto y se han enviado a un equipo técnico audiovisual para mejorarlas. Son imágenes de dron policial, pero fue todo en horario de oscuridad", por ello, "requieren de mejora técnica para su visualización más precisa". Se trata de imágenes en las que "sí se aprecia el impacto a esta persona, pero no se detecta la procedencia".
Por tanto, "la investigación policial avanza y, según va llegando información nueva, se va trasladando al juzgado competente que está instruyendo la causa", aseguran desde el Departamento de Seguridad de Gobierno Vasco.