El Ayuntamiento de Amorebieta ha comenzado esta semana con las obras para dotar a los barrios de Marabi y Urgoiti con una nueva red de abastecimiento de agua potable.
En la actualidad, ni Marabi ni Urgoiti cuentan con suministro de agua potable municipal desde el sistema general de abastecimiento. El abastecimiento del barrio de Marabi se realiza a través de un suministro particular de agua de manantial no tratada. Además, debido a la antigüedad de esta red, el agua que se distribuye a los caseríos de la zona presenta diversas averías y los meses de verano no tiene la suficiente capacidad para aportar el caudal necesario para su correcto funcionamiento.
El Consistorio zornotzarra realizará una conexión en el barrio de Boroa mediante la instalación de un grupo de presión que irá ubicada en una nueva caseta a ejecutar en el cruce entre los barrios de Marabi y Urgoiti. En esta nueva caseta, con unas dimensiones interiores de 3x3, se colocará el nuevo grupo de presión compuesto por dos bombas alternadas capaces de bombear 8,60m3/h; las conducciones se realizarán con calderería inoxidable. Asimismo, de esta caseta saldrán los dos ramales que distribuirán el agua potable hacia Marabi y Urgoiti. Del mismo modo, y con el objetivo de minimizar lo máximo posible las afecciones y mantener la red existente mientras dure la obra, el Ayuntamiento ha previsto ubicar las nuevas zanjas en paralelo a la red existente; así, se podrán programar los cortes de agua que se deban realizar.
El presupuesto de estas actuaciones es, aproximadamente, de 178.000 euros y está previsto que esté terminada en un plazo de cinco meses.
Más actuaciones
La administración local sigue actuando en diferentes barrios para poner en marcha nuevas redes de agua potable. Una de las últimas también se ha ejecutado en el barrio Kimera. La obra consistió en derivar agua del depósito de Arkotxa mediante una nueva conducción, realizando una conexión con una tubería ya existente en Kimera.
Hasta la actualidad, este enclave zornotzarra se suministraba desde un manantial que se regulaba mediante un depósito, “no obstante, no recibía un tratamiento potabilizador moderno y adecuado a las necesidades del medio rural”, apuntan fuentes municipales. Ahora, gracias a la obra ejecutada, el barrio recibirá el agua tratada de la red general.