Ana Baneira, la gallega de 25 años encarcelada en Irán y liberada recientemente, asegura estar "superfeliz" tras su regreso a casa, con su familia, en A Coruña, agradecida por todo el trabajo realizado para su liberación y confiada en que también se logre la del otro retenido en el país, Santiago Sánchez.
Lo hace, además, insistiendo en que no es "activista". "Entré el 6 de septiembre, no había ningún tipo de protesta ni se le veía venir", asegura tras explicar que viajó a Irán como 'mochilera'.
Detención en octubre
Lo hizo tras visitar antes Turquía, Georgia y Armenia y sin que, inicialmente, estuviese programado. "Al principio de mi viaje, el objetivo no era ir a Irán sino a la capital de Azerbaiyán, pero estaba cerrada la frontera por tierra y decidí bajar a Irán", país del que destaca la hospitalidad de su gente y al que reconoce que volvería "si me prometen que no me van a detener".
En cuanto a su detención, "el 11 o el 12 de octubre", precisa, explica que se produjo tras ir a pedir, previamente, un visado a la oficina de migración para quedarse más tiempo en Irán y cuando estaba con un compañero iraní en el coche repostando gasolina sin que, en un primer momento, le explicasen por qué la detienen. "Te obligas a pensar que te van a liberar, pero no sabes cuándo", señala tras su paso por dos cárceles.
Santiago Sánchez
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha hablado por teléfono este jueves con su homólogo de Irán, Hosein Amirabdolahian, para solicitarle nuevamente la liberación de Santiago Sánchez, también detenido en este país desde el pasado octubre, según han informado fuentes diplomáticas.
Esta llamada es la tercera entre ambos mandatarios. Su departamento también ha trasladado que continúan los esfuerzos tanto desde los servicios consulares en el Ministerio como desde la Embajada en Teherán para lograr su liberación y se mantiene informada a su familia en todo momento.
Santiago Sánchez Cogedor fue arrestado a principios de octubre cuando se dirigía a pie a Qatar para ver el Mundial de Fútbol. Su detención se produjo precisamente tras visitar la tumba de Mahsa Amini.