Ana Obregón comienza su otoño más feliz en compañía de su nieta Ana Sandra: “Me siento crepúsculo en este atardecer”

Ana Obregón ha querido dar la bienvenida a su otoño más feliz desde el fallecimiento de su hijo Aless. La presentadora ha mostrado la alegría con la que recibe la nueva estación gracias a la persona que le ha cambiado la vida, su nieta, Ana Sandra, que ha devuelto las ganas de vivir y ha traído la felicidad de nuevo a casa de la conocida actriz.

Ana ha querido compartir este fin de semana nuevas fotografías en las que aparece en compañía de la pequeña Anita, que no deja de crecer y ya mira directamente a la cámara a la hora de posar junto a su abuela con tan solo seis meses y mostrándose muy curiosa respecto a todo lo que la rodea.

ANA OBREGÓN DA LA BIENVENIDA AL OTOÑO JUNTO A SU NIETA Y RECUERDA A ALESS

Anita posa en brazos de Ana Obregón ataviada con un vestido vaquero de manga larga con botones adornado con dos corazones rosas a juego con sus leotardos.

La niña aparece de lo más risueña en las imágenes, al igual que la actriz que no puede borrar una amplia sonrisa de su cara desde que Ana Sandra ha llegado a su vida, y ambas aparecen en una sencilla escena cotidiana rodeada de juguetes y sentadas sobre una manta con motivos infantiles, mientras en el fondo de la estampa se pueden ver varios árboles y una tinaja decorativa que no deja lugar a dudas de que el lugar elegido para la estampa es el jardín de la casa.

Además, Ana no ha querido dejar de recordar a su hijo Aless y ha acompañado su publicación con unas nostálgicas palabras dirigidas precisamente a él.

"Aunque otro otoño ha llegado sin ti, la sonrisa de tu hija cuando arruga la nariz hace que me sienta crepúsculo en este atardecer", escribía la presentadora en un conmovedor texto acompañado de la canción ‘What a wonderful world’.

El post de Ana no ha tardado en llenarse de mensajes de cariño de sus amigos y seguidores, entre ellos algunos como el de Carmen Lomana a la que la pequeña Anita ha conquistado al instante: "¡Tu hija es un sueño de niña! Siempre feliz, ¡siempre muerta de risa! Qué suerte, Ana", decía, o Teresa Bueyes, que recordaba que "¡La vida es siempre sorprendente! Esa pequeñita es el milagro de la vida, que siempre continúa...", recordaba la abogada.