En el ecuador de las fiestas patronales de Cintruénigo, la jornada ha estado dedicada a las mujeres cirboneras, a cuyos actos protocolarios ha acudido la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, que está pasando unas jornadas festivas en su localidad natal. De este modo, el día ha estado protagonizado por varias mujeres y organizado por la Asociación Cultural Alhama que preside María Carmen Chivite.
El primero de los actos ha tenido lugar en la residencia de ancianos, a donde ha acudido la junta directiva de la Asociación para llevar a cabo un homenaje especial para la cirbonera más longeva de la localidad: Vicenta Chivite Garbayo, que a mitades del próximo mes de octubre cumplirá 107 años, y a la que le han regalado una caja de bombones de trufa. Además, al centro geriátrico del municipio le han obsequiado con un centro de flores en honor a todas las residentes.
Posteriormente, en el salón de plenos del Ayuntamiento, con la presencia de toda la Corporación, la presidenta del Gobierno de Navarra, parlamentarios forales y diputados del Congreso, se ha procedido al nombramiento de Ana Ramírez de Ocáriz como cirbonera popular. El título le ha sido concedido por su labor desde hace 22 años como responsable de la biblioteca pública de la localidad, destacando además su labor social y su dedicación para fomentar la lectura entre grandes y pequeños a través de numerosas actividades a lo largo del año. También han sido homenajeadas las cirboneras ausentes Joaquina Sarmiento y Felisa Garbayo, que en esta ocasión se encontraban en su pueblo para recibir el galardón. Por último, ha tenido lugar el reconocimiento al bebé más pequeño, en este caso a la niña Lucía Marín Tello, que solo cuenta con tres semanas de vida.
Aparte de estos homenajes, ha sido investida la nueva Corporación femenina presidida por la alcaldesa Tania Martínez Jiménez, una joven cirujana traumatóloga que ha destacado “el importante papel que la mujer desempeña en la sociedad actual”, aunque a su juicio “tiene que llegar el día que esto no se celebre y se reconozca la igualdad entre hombres y mujeres”. Tras echar el cohete desde el balcón del Ayuntamiento, la comitiva, acompañada por las dos gigantas de la comparsa, ha desfilado hasta la iglesia parroquial para hacer una ofrenda floral a la patrona, la Virgen de la Paz.