El currículo de Anna Montañana (Alboraya, 24-10-1980) es impresionante. Fue la jugadora más joven en debutar en la Liga Femenina con casi 14 años en el Ros Casares y logró una Copa de Europa, 3 Ligas y 3 Copas, además de militar durante una temporada en las Minnesota Lynx de la WNBA. Con la selección española fue 129 veces internacional y conquistó un bronce mundial y una plata y dos bronces europeos. Como entrenadora, fue la primera mujer en ocupar sitio en un banquillo de la ACB, el del Fuenlabrada, y desde 2020 ha dirigido al Sabios de Manizales de Colombia y ha pertenecido al cuerpo técnico del Obras Sanitarias de Argentina. En los últimos veranos ha coincidido con Mario López en los equipos formativos de España y de ahí que piense que puede ayudar al equipo a alcanzar al play-off.
Ha sorprendido su llegada a estas alturas al Lointek Gernika.
–Mario (López) y yo tenemos relación laboral desde hace cuatro veranos, yo me volví de Argentina y él pensó que le podía ayudar. Nos conocemos muy bien, sabemos cómo trabajamos y eso va a acelerar la adaptación en este escaso tiempo que queda de temporada y ha sido fácil decidir.
¿Y qué puede aportar en este poco tiempo que queda, tres partidos de Liga regular y, ojalá, el play-off?
–Cuando una persona, al margen de que sea yo, llega nueva en el mes de abril después de que el equipo haya pasado muchas situaciones buenas y malas, puedes aportar experiencia, energía y aire fresco para poder hablar con las jugadoras con claridad. Eso es lo que más puedo aportar de forma instantánea, además de apoyo al cuerpo técnico en la preparación de los partidos.
¿Cómo ha visto a las jugadoras después de todo lo que han vivido esta agitada temporada?
–Bien. Hay que tener en cuenta que las temporadas se hacen largas, aquí y en cualquier otro equipo. Ahora se trata de ser prácticas porque aún quedan objetivos bonitos y por eso no hay que pensar tanto en el pasado, sino en lo que queda por delante. Les digo que dentro de un mes y medio echarán de menos esto y por eso hay que exprimirlo todo lo que se pueda.
¿Y cómo le han visto las jugadoras a usted, con la extraordinaria trayectoria que tiene en el baloncesto?
–Ah, muy bien. Ya me conocen porque hace dos años, tras salir de Fuenlabrada, ya vine a estar con Mario y ver cómo trabaja en la élite en verano también estuve en Gernika. Saben que tenemos amistad y muchas horas de trabajo juntos y así ha sido muy fácil entrar en el grupo porque, además, les he visto todos los partidos.
¿Esta estancia en el Lointek Gernika tiene visos de continuidad más allá de esta temporada?
–Bueno, quería ver cómo van las cosas porque después del último año en el que he estado fuera no pensaba llegar a otro equipo, pero la situación ahora era ideal para mí y para el Lointek Gernika y creo que podemos ayudarnos mutuamente. Pero soy bastante de lo inmediato, de primero lo primero y luego lo siguiente y cuando acabemos ya analizaremos y decidiremos. De lo que estoy segura es que en este corto tiempo voy a estar muy bien trabajando con Mario, con el Gernika y en Gernika.
No podía haber mejor manera de estrenarse que con la victoria ante el Campus Promete en la fiesta de Miribilla.
–Sí, me pude quitar la espina porque en Miribilla ya perdí con el Fuenlabrada, jaja. Jugar en Miribilla con ese ambiente es un extra para todos: para las chicas, para los entrenadores, para el club. Sacar esta victoria delante de más de 4.000 personas tiene que ser muy importante para la confinza y servir para afrontar lo que queda. Yo ya pienso en el partido del miércoles en Leganés, que será otro reto ya que ellas se juegan mucho y después de estos subidones hay que evitar los bajones.
Quedan tres partidos. ¿Cuántos harán falta para entrar en el play-off?
–No lo sé porque odio las cábalas. Estuve tres temporadas en el Fuenlabrada y teníamos que hacer todas las cuentas del mundo para quedarnos en la ACB, pero cuando piensas en los demás nunca se cumple nada de lo que esperas. Por eso, tenemos que preocuparnos de nosotras mismas, de hacer un buen trabajo y tratar de ganar el miércoles para sumar otra vez dos victorias consecutivas para el objetivo que tenemos.
"No hay que pensar en el pasado porque quedan objetivos bonitos y hay que exprimir la temporada todo lo que se pueda"
"Llegando nueva en abril, puedo aportar experiencia, energía y aire fresco para poder hablar con las jugadoras con claridad"