Mañana, a las 18.30 horas, el Deportivo Alavés jugará una de las once finales que le restan por disputar en la presente temporada. Tras su gran actuación ante el Sevilla, los albiazules saltarán al césped de Anoeta con la intención de sorprender a otro de los grandes equipos de la Primera División y, cuando miren a las gradas del feudo txuri-urdin, se darán cuenta de que, al igual que no estuvieron solos el pasado viernes en Mendizorroza, tampoco lo estarán en esta ocasión.
En ese sentido, pese a que, sin ningún tipo de duda, serán más de 700 los seguidores babazorros que acompañarán al Glorioso en su travesía por tierras donostiarras, ese es el número de entradas que ha podido vender la entidad del Paseo de Cervantes a lo largo de la semana. Unos boletos que, cabe mencionar, se han repartido de forma casi instantánea en tres remesas diferentes que, incluso, han dejado fuera a bastantes aficionados, lo que demuestra, por enésima vez, el compromiso de esta hinchada.
"En las buenas y, sobre todo, en las malas". Así piensan Pablo Sáenz e Ibon Ajuria, dos amigos y excompañeros de clase que, aunque el Alavés les haya dado muy pocas alegrías a domicilio esta campaña, no dudaron ni un segundo en aprovechar la oportunidad de animar a su equipo en Anoeta. "Según salieron las localidades a la venta, Pablo me llamó y nos plantamos en la tienda. Me sorprendió que se agotaran tan rápido, porque eran bastantes entradas, pero así es esta afición, no abandona nunca", cuenta Ibon.
Para ambos es, además, "una ocasión especial", pues la última vez que viajaron juntos para ver a la escuadra vitoriana lejos de Mendizorroza fue en un partido frente al Leganés en Butarque –poco antes de que iniciara la pandemia del covid-19–. "La visita a Anoeta me genera una ilusión muy similar a la de mi primer on tour con el Glorioso. Es muy estimulante que vayamos a ir tanta gente y ojalá podamos volver con un buen resultado, aunque lo importante es el hecho de estar allí junto a toda la hinchada", explica Pablo.
Respecto a la imagen del Alavés en las últimas semanas, uno y otro coinciden en que "ha habido una mejoría", pero Pablo, quien asegura estar "convencido al 100%" de que se conseguirá la permanencia, es bastante más positivo que Ibon. "Estamos mejor, es evidente. Sin embargo, no sé si es demasiado tarde teniendo el ritmo de los rivales. Además, a pesar de que hemos sido más fuertes en defensa últimamente, me sigue preocupando depender tanto de Joselu en ataque", manifiesta este último.
Situación delicada Esa misma inquietud, pero llevada más al extremo, es la que tiene Javi García, otro de los alavesistas que estará mañana en las gradas de Anoeta y con los que ha contactado DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA. Ahora bien, su caso no es muy similar al de los anteriores, ya que, además de llevar casi medio siglo apoyando al conjunto babazorro, también sabe lo que es vivirlo desde dentro –pasó por todas las categorías del fútbol base y, posteriormente, entrenó junto a Emilio Quílez en la propia cantera albiazul–.
"Mi pesimismo no es algo reciente. Considero que, deportivamente hablando, llevamos casi cuatro años sin un proyecto que nos permita consolidarnos. Se apuesta solo por salvar la categoría y, en algún momento, nos va a salir mal la jugada. Por ello, hay mucha gente triste y desilusionada que yo sé que es del Alavés, pero que quizás no vuelva la próxima temporada a Mendizorroza si esto continúa así", expresa.
Para Javi, en lo referente a lo estrictamente futbolístico –y aunque la actuación frente al Sevilla le dejara "buenas sensaciones"–, no ha habido "tanta mejoría" como se piensa. Sin embargo, esa negatividad no le hace perder del todo la esperanza. "Tengo ganas de ir a Anoeta, pero soy consciente de que lo normal es regresar con una derrota. Hay opciones todavía y creo que no podemos salvar si potenciamos varios aspectos y vamos partido a partido. No podemos pensar en lo fácil o difícil que va a ser el calendario en las últimas jornadas", señala.
Por fortuna, el corazón, cuando se habla de fútbol, muchas veces tira más que la cabeza y tanto Javi como Pablo e Ibon han pronosticado un resultado positivo cuando se les ha pedido una porra. El primero se ha decantado por el 1-2, que permitirá "coger la motivación necesaria para ganar también al Granada"; el segundo, por su parte, ha apuntado un 0-1; y el último se ha quedado con el 0-2. Habrá que esperar al domingo para comprobar si alguno de los tres ha acertado.
"Tras lo vivido en la pandemia, la visita a la Real me genera una ilusión similar a mi primer viaje con el Alavés"
"Estoy convencido al 100% de que vamos a conseguir la permanencia"
Pablo Sáenz
Aficionado del Alavés
"Aunque hubiera querido ir de todas formas, la mejoría del equipo motiva aún más a ello"
"Según salieron las entradas a la venta, Pablo me llamó y nos plantamos en la tienda"
Ibon Ajuria
Aficionado del Alavés
"Todavía nos podemos salvar, pero tenemos que ir partido a partido; no nos ayuda pensar en el calendario"
"Tengo ganas de ir a Anoeta; sin embargo, no puedo esconder que la ilusión no es la de antes"
Javi García
Aficionado y exjugador del Alavés