Son pocas las personas que admiten no ser fieles amantes del chocolate. Y es que este producto amado por muchos tiene un hogar en territorio guipuzcoano, concretamente en la ciudad de Tolosa. El Museo del Chocolate de Rafa Gorrotxategi ofrece un recorrido por la evolución histórica de la elaboración del chocolate, ya que se trata de una historia que cuenta con más de cinco siglos de vida.
Nos adentramos en su dulce corazón, donde podemos descubrir metates y toda clase de herramientas primitivas, algunas de ellas precolombinas. Además, en la visita podemos visionar el documental Txokolatea en un espacio anexo al museo, donde se imparten talleres, catas y degustaciones.
Uno de los primeros obradores eléctricos de Euskadi
El obrador reacondicionado de Juan Ignacio Garmendia es uno de los primeros obradores eléctricos de Euskadi, por lo que destaca como uno de sus rincones más especiales. La familia Garmendia era oriunda de Abaltzisketa y empezaron a trabajar con el chocolate en el año 1880 con un sistema artesano manual. En el año 1920 se puso en marcha de forma eléctrica y se convirtió en un obrador moderno y bien preparado para aquella época, cuyo funcionamiento nos explican al detalle en esta zona.
La colección del museo
En su museo del chocolate, Rafa Gorrotxategi nos muestra una amplia colección de chocolateras procedentes de América y Europa, molinillos de madera, jícaras de porcelana y mostacheras. También forman parte del conjunto morteros, grandes molinos, tostadoras, tahonas y refinadoras, moldes, balanzas y otros utensilios de colecciones privadas que ha ido adquiriendo el txokolatero a lo largo de los últimos treinta años.
Diferentes zonas
El museo del chocolate se encuentra dividido en diversas zonas que explican toda su historia. El comienzo nos sitúa en la Zona Cerería, donde nos cuentan que antes de que llegara el cacao a nuestra tierra, el oficio que luego pasó a ser de confitero-txokolatero era el de cerero (el trabajo consistía en hacer velas con la cera de las colmenas).
Continuamos hacia la Zona Metate, en la que descubrimos que el metate es una pieza de piedra que se utilizaba para moler alimentos, cacao, cereales..., hasta incluso para moler y preparar arcilla. En la Zona Molinos y Morteros nos explican que, desde sus inicios, el chocolate se ha tomado bebido y un poco espeso, y que para espesar esa bebida se ponía harina de trigo o de arroz en un molino manual. Además, nos enseñan los tres tipos de morteros que se solían utilizar.
Por si esto fuera poco, en la Zona Tostadores aprendemos que el cacao siempre se ha tostado, pues es uno de los procesos más importantes para el desarrollo de un buen aroma y buqué. Sin olvidarnos, por supuesto, de la mencionada Zona Obrador de Txokolate de Ignacio Garmendia.
Rafa Gorrotxategi
Como parte de la tercera generación de la Familia Gorrotxategi, Rafa Gorrotxategi trabajó con su padre José Mari Gorrotxategi y se formó en confiterías de gran prestigio. Entre ellas, se encuentran tres de las mejores del mundo en Pastelería y Chocolatería: Antonio Escribá (El Mago del Chocolate) en Barcelona, Robert Linxe de la Maison du Chocolat en París y Pastelería Totel de Paco Torreblanca de Elda (Alicante). Enamorado del chocolate y de su historia, durante más de 30 años ha ido adquiriendo una espectacular colección de enseres que ahora muestra en su Museo del Chocolate.