Pocos países despiertan tanta curiosidad como China. Su cultura, su gastronomía y, sobre todo, su idioma, hacen que muchos se sientan atraídos por este país del Lejano Oriente. Ya sea por simple amor a la lengua o porque abre muchas oportunidades laborales, cada vez son más quienes dan el paso de estudiar chino.
Una opción idónea para ello es el Instituto Chino de Bilbao. Se trata del primer centro formador y examinador de Euskadi y ofrece clases de chino mandarín, japonés y coreano pero también de la cultura y el protocolo de estos países. Su directora, Megan Fowler, nos ha explicado que tienen clases para todos los niveles y edades. De sus más de 200 alumnos, algunos tienen sólo cinco años: "Muchos son niños cuyos padres saben que el chino es el idioma del futuro y quieren que empiecen desde pequeños, pero hay de todo. Muchos son trabajadores de la industria, de empresas que trabajan mucho con China".