El Ayuntamiento de Orio aprobó, por unanimidad, el presupuesto general para el próximo año y la norma municipal de ejecución presupuestaria. En total, el presupuesto asciende a 9.039.179 euros, 586.430 euros más que el año anterior, un 7% más.
Para hacer posible este incremento, las principales fuentes serán la Diputación Foral (el Fondo Foral), las Ordenanzas Fiscales recientemente aprobadas y los beneficios recaudados por el camping municipal durante este año.
El 40% del presupuesto se destinará a gastos de personal. El Ayuntamiento contratará en 2023 un peón multifuncional y un administrativo que se dedicará a la digitalización y un arquitecto técnico para reforzar la Oficina Técnica.
Se reforzará también la partida destinada a Educación en el marco de la nueva Ley de Educación, con el fin de aumentar la cohesión entre la ciudadanía.
El incremento del precio de la energía también ha afectado directamente al Ayuntamiento y ha supuesto un gran reto en las instalaciones deportivas y en las calles, la limpieza, jardinería, el Gazteleku y la Ludoteka. Es por eso que el Consistorio realizará un esfuerzo especial en los próximos meses.
Además, el Ayuntamiento ha apostado decididamente por convertir a corto plazo el Palacio Iturriaga en una Casa Morada. Para fomentar el uso del euskera, el Consistorio se implicará activamente en el proyecto Euslider y fomentará el club de lectores.
Anuska Esnal, alcaldesa de Orio, subrayó dos cuestiones relacionadas con el tráfico. Afirmó que en el verano de 2023 habrá un nuevo tren Txu-txu en la localidad que se contratará en régimen de alquiler. En cuanto a la continuidad o no del proyecto de variante de la calle Aita Lertxundi se establecerán sistemas de medición del número de coches y de la contaminación acústica. Los datos obtenidos reflejarán el cumplimiento de las condiciones de cambio de carácter de la calle.
Por último, se han reservado 125.000 euros en el crédito global para poder cumplir la ley de estabilización del personal que se fijará antes de fin de año, y en relación con las inversiones, se han abierto partidas para mejorar la accesibilidad de la localidad, estudiar la reparación del suelo del Casco Viejo, instalar cargadores para los coches eléctricos y llevar a cabo proyectos de transición energética.