LA vigesimocuarta planta de la Torre Iberdrola de Bilbao se eleva lo suficiente como para que desde sus ventanales se vea el Nervión desembocando en El Abra. La ría da sentido al botxo, pasa bajo los puentes y se acuesta en el Cantábrico. Pero nace con un gran brinco desde Araba. La pila en la que se bautiza en Delika constituye el salto de agua más alto de la península. Son 270 metros. En la cima, Araba. Abajo, Orduña, Bizkaia.
Ayer se distinguía El Abra sin problemas. Quienes promovían el acto que se desarrollaba, con esas vistas, y las de toda la ciudad a sus pies, invitaban a viajar corriente arriba, superar el salto de Delika y adentrarse en Araba. Proponían hacerlo sin prejuicios, tomándose el tiempo necesario para disfrutar del paisaje, las gentes y los secretos que aún esconde el territorio.
La primera sorpresa la proporcionaba la copa de bienvenida. ¿Un tinto de Rioja Alavesa? ¿Un txakoli del Valle de Aiala? Nada de eso. Un vermut rojo denominado Todo el Rato, que César Sáenz de Samaniego, de la Ruta del Vino, aseguró que "podría tratarse del primero elaborado en Rioja Alavesa" y que reveló obra de Bodegas Javier Sampedro. Las alternativas eran un blanco, Tierra, de Labastida, o el rosado M. Bello, de Samaniego. Así se quiebran las ideas preconcebidas y se alimenta la curiosidad.
Después de los saludos, un vídeo que encadenaba estimulantes vistas aéreas de Araba. La anfitriona, Cristina González Calvar, diputada foral de Fomento del Empleo, Comercio y Turismo, señaló que "Álava es un buen destino para enamorar o reenamorar a tu pareja" y destacó, además, el gran esfuerzo que se está realizando para generar experiencias inclusivas a las que puedan acceder personas con movilidad reducida. "Es sabido que en nuestro territorio se puede comer bien... y beber muy bien", concluyó con una sonrisa.
La concejala de Promoción Económica, Empleo, Comercio y Turismo del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, Maider Etxebarria, subrayó las virtudes del casco histórico de la capital alavesa, su anillo verde y los bosques de hayedos de los montes circundantes. Etxebarria recalcó que Gasteiz es una de las pocas ciudades europeas que cuenta con dos catedrales: la nueva y la vieja.
El consejero de Turismo, Comercio y Consumo, Javier Hurtado, reconoció que "Euskadi es fácil de promocionar. Ofrece costa, naturaleza, gastronomía, ciudades, museos de prestigio internacional... Y todo, en muy pocos kilómetros". Hurtado se comprometió a continuar impulsando y presentando Euskadi como destino, "aunque con la recomendación de la necesaria prudencia".
Cerraron las intervenciones Jon Lasa, gerente de la Fundación Catedral de Vitoria, y Pablo de Oraá, director de Valle Salado de Añana. Ambos resaltaron las singularidades y atractivos del restaurado monumento gótico y de unas revitalizadas salinas "en funcionamiento ininterrumpido desde hace nada menos que 7.000 años".
Asistieron Yolanda Gerediaga, de Ercisa; Berta Alonso, de Eventia; Pedro Herbosa, de Travelling Band, Itziar Leguina, de Bicicletos Viajes; Andoni Acedo, de Zafiro Tours; Paula Valdivia, de Viajes Ikea; Fernando Varas y Andoni Cabrero, de Myway Viajes; Chelo Escabias, de North Incoming Service; Marta Sanz de Ugarte, de Landing Basque Country, o el agente de viajes Mikel Urkijo. No faltaron Kike Alonso, de Onda Vasca, o Eduardo Vázquez Antón, de ON Grupo Noticias. También acudieron Garbiñe Naverán y María Lezama, de Bilbao Paso a Paso; la presidenta de la Academia Vasca de Gastronomía, María del Mar Churruca; Alex Chang, de Fresco Tours, o Asun Rodríguez, de Katal Tours.
Algunos se percataron que desde el lado sur de la planta 24 de la Torre Iberdrola no se puede contemplar El Abra, pero sí la cresta de Ganekogorta. Y Araba se adivina ahí mismo, al otro lado de la ladera.
Araba presentó ayer la renovada oferta turística que ofrece su territorio con un almuerzo en la Torre Iberdrola de Bilbao
El consejero Javier Hurtado, la diputada foral Cristina González y la concejala Maider Etxebarria intervinieron en el acto