El presidente catalán, Pere Aragonès, y el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, se reunieron este jueves discretamente en Barcelona, en una cita no anunciada en la que abordaron "temas de interés" abiertos entre ambos ejecutivos, si bien el Govern descarta una "normalización" de relaciones que sí se destaca desde la Moncloa.
Según ha avanzado La Vanguardia y han confirmado a EFE fuentes de ambos gobiernos, la reunión se produjo ayer por la mañana, coincidiendo con la visita de Bolaños a Cataluña y antes de que el president emprendiera por la tarde su viaje institucional a Irlanda del Norte, donde se vio con el ex primer ministro irlandés Bertie Ahern y este viernes lo hará con las líderes del Sinn Féin.
El encuentro entre Aragonès y Bolaños, que no ha trascendido hasta hoy, se da precisamente en una semana en que tanto el Govern como la Moncloa han admitido que será complicado que la mesa de diálogo pueda volver a reunirse en este 2023.
La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, lo atribuyó al contexto electoral de este año, mientras que la portavoz del Gobierno, la ministra Isabel Rodríguez, aseguró que no hay fecha para una nueva reunión de la mesa de diálogo porque "se ha recuperado la normalidad institucional", que ambos ejecutivos hablan y dialogan "permanentemente" y no es necesario un "instrumento extraordinario".
En este contexto, fuentes de la Moncloa han apuntado, respecto a la cita Aragonès-Bolaños, que los encuentros "discretos" entre el Gobierno y responsables autonómicos son "habituales".
Un hecho que ha confirmado Isabel Rodríguez en una entrevista este viernes en La 2 y Ràdio 4: "En el marco de esta normalidad es habitual mantener encuentros que no forman parte de la agenda pública, porque no se va a resolver nada que tenga una incidencia para compartir con la opinión pública".
"Son contactos institucionales, personales, que después ayudan a seguir manteniendo estas buenas relaciones institucionales y en este marco es donde hay que valorarlo", ha señalado respecto a la reunión de ayer.
A su juicio, "es muy importante la normalidad y, en todos los ámbitos de la política como de la vida, hay hechos que tienen trascendencia administrativa, y por tanto, requieren de este tipo de publicidad, de dación de cuentas, y otros que tienen que ver con la relaciones personales, con los contactos institucionales que avanzan y que dan cobertura a una mejor relación".
En cambio, fuentes de la Generalitat han matizado que no se puede hablar de "normalización" de las relaciones y han insistido en que aún hay diversos temas abiertos sobre la mesa respecto a los que es conocida la "discrepancia " entre los dos gobiernos.
Aunque esas fuentes del Govern han evitado dar detalles sobre el contenido de esa cita "privada", han recalcado que resulta evidente que hay "muchos temas" a abordar con la Moncloa y que la posición del presidente catalán sobre los mismos es clara y la reitera en cada encuentro con representantes del Ejecutivo central.
Tras el desbloqueo del acuerdo de presupuestos catalanes entre ERC y PSC, el Govern ya ha avanzado en últimos días que la intención de Aragonès en este 2023 será poner el foco en impulsar un acuerdo de claridad que marque las condiciones mínimas para un referéndum de independencia pactado.
Sin dejar de lado tampoco la reclamación de una amnistía, como objetivo final de la llamada agenda de la desjudicalización que ERC y el Gobierno acordaron en el marco de la mesa de diálogo y que permitió en su momento los indultos a los dirigentes independentistas y, a finales de año, la reforma del código penal.