Escondido en la sierra de Urbasa-Andía, encontramos un lugar sorprendente alrededor del cual las personas se arremolinan y hacen cola para sacarse una foto. Es el Arco de Portupeloleze, uno de los rincones de Navarra más populares en Instagram.
Se trata de un enorme arco de roca, tallado por el agua. La sierra es un paisaje kárstico. Hace millones de años, el mar cubría la zona, y los restos de los seres vivos de la época se convirtieron en roca caliza. Esta es blanda y fácilmente moldeable por el agua que almacena en su interior, dando lugar a un relieve con simas, cuevas y construcciones naturales tan curiosas como este arco.
Para llegar al Arco de Portupekoleze, se estaciona el vehículo en el parking que hay frente a la Venta de Lizarraga. La ruta comienza tomando la pista que sale de la izquierda de la venta. Tras caminar unos metros, se abandona esta y se toma una senda que sale a la derecha junto a una borda. Esta senda no está marcada, pero se intuye porque asciende hacia la cresta.
Una vez en la parte alta, continuamos caminando y en seguida hallaremos el Arco. Para verlo, no hay que mirar hacia arriba sino hacia abajo, pues nos encontramos encima de este. Una vez llegados a este enclave, es posible descender hasta la base del arco para tomar fotos.