Los cocineros Karlos Arguiñano y Aaron Ortiz recibieron ayer el Premio Navarra de Gastronomía dentro de la Fiesta de la Gastronomía Navarra que celebró Cintruénigo durante todo el fin de semana. Karlos Arguiñano no pudo acudir, por lo que el galardón lo ha recogido su hijo Joseba, conocido por sus apariciones en programas gastronómicos de ETB. El alcalde, Óscar Bea, señaló que el premio se entregaba a estos dos grandes y reconocidos cocineros por “su gran trabajo y su labor por promocionar los productos de nuestra tierra”.
Foto de grupo con los homenajeados
La cita, según indicó el alcalde, tiene el objetivo de “dar a conocer nuestros productos y la riqueza de nuestra tierra” y en él reivindicó la importancia del Canal de Navarra. Bea recordó de Arguiñano su relación con Navarra, ya que tiene familia en Morentin, cerca de Estella. Con 17 años entró en el Hotel Euromar de Zarautz y en 1970 pasó al club de golf de la misma localidad donde en 1978 abrió su restaurante. En 1986 abrió su propia escuela de cocina y fue uno de los precursores de la Nueva Cocina Vasca. Cocinero mediático por excelencia ha escrito más de 50 libro de recetas.
En relación a Ortiz, destacó su juventud, 27 años, y la cantidad de logros conseguidos, entre los que destacan el premio Jóvenes Talentos 2022 y la apertura de su restaurante Kabo en 2019, donde ha logrado un sol de la guía Repsol. Con apenas 20 años logró también el Premio a la Excelencia Gastronómica y es uno de los nuevos valores de la cocina navarra. Joseba Arguiñano disculpó la ausencia de su padre y agradeció el galardón al tiempo que aseguró que los Arguiñano “seguiremos dando guerra, aprendiendo y difundiendo la Gastronomía y nuestra huerta que es todo Navarra”. Ortiz, dueño del restaurante Kabo, dedicó su premio a su pareja Jaione por el trabajo que hace en sala y “a los hortelanos y pequeños productores y al sector primario que pasan por un mal momento”.
En la ceremonia también se homenajeó al periodista local de Navarra TV Sergio Jiménez, presentador del programa Los fogones del reino, que actuó de pregonero y recordó expresiones y refranes que tienen que ver con la gastronomía. Incidió en la importancia de la comunicación dentro de la gastronomía “la gastronomía envuelve nuestro lenguaje, define nuestra forma de hablar: buscamos nuestra media naranja, nos encontramos con un cardo, damos la vuelta a la tortilla o se da calabazas a alguien que podría haber sido la leche”, y concluyó “quédate con quien sepa cocinar, la belleza se va, el hambre no”. Durante la mañana se celebró la feria con la venta de productos navarros ( miel, chorizo, chocolate, pastas, chistorra...) y se repartieron 1.200 raciones de una ternera asada que pesó 280 kilos y que estuvo al fuego 14 horas.