La nueva presidenta del Congreso, Francina Armengol, se ha comprometido a que en el pleno de la Cámara Baja se pueda debatir y hablar en todas las lenguas cooficiales, en catalán, euskera y gallego a partir de la sesión de hoy, en la que se ha constituido el Congreso y arranca la XV Legislatura.
En su discurso una vez que todos los diputados han adquirido su pleno derecho como parlamentarios al tomar posesión de sus escaños, Armengol ha invitado a toda la Cámara "a construir entre todos los espacios para que esta España real se conozca y se reconozca mejor desde la escucha y el diálogo".
"Para que las razas, las lenguas y las identidades no sean barreras de cristal", ha puntualizado tras defender la pluralidad de ideas desde el respeto en una España "llena de colores y de matices".
"Como las barreras y los techos de cristal que han tumbado en el otro lado del planeta nuestras futbolistas que están haciendo historia en Nueva Zelanda y Australia...Yo me comprometo a trabajar para que no sea una anécdota que la presidencia del congreso la ejerza una mujer que viene de unas islas con una lengua y cultura propias", ha señalado.
Evitar "tensiones gratuitas"
Armengol, que ha mencionado la figura política del socialista Félix Pons, que como "mallorquín excepcional" presidió el Congreso durante una década y fue una figura "política que contribuyó a consolidar la democracia", ha reivindicado el valor de la proximidad que debe tener el Congreso hacia los ciudadanos.
"Para conseguir que los ciudadanos sientan que el Congreso y las instituciones son importantes para ellos y vean la política como algo útil que contribuye a mejorar sus vidas", ha indicado tras incidir en que el nuevo pleno constituido hoy debe evitar "tensiones gratuitas y enfrentamientos estériles que solo contribuyen a dividir".
La nueva presidenta del Congreso, que ha obtenido el apoyo de 178 diputados, entre ellos los de los nacionalistas vascos y catalanes, ha dejado patente que se hablarán todas las lenguas cooficiales y reconocidas por la Constitución en la Cámara y ha usado ella misma el catalán en varios momentos de su discurso, así como el euskera y el gallego.
"Se trata de sumar, de dialogar, de falar, parlar, de practicar el diálogo porque España siempre avanza cuando reconoce su pluralidad, y tenemos la oportunidad de abandonar los miedos, escapar de las divisiones", ha insistido.
"Y esta presidencia permitirá la utilización de todos estos idiomas desde esta sesión constitutiva. Del catalán, del euskera y del gallego", ha zanjado.
Francina Armengol ha iniciado su primer discurso enviando todo su apoyo y el de la Cámara Baja a los afectados por el incendio que asola la isla de Tenerife y ha aludido además a la "enorme responsabilidad" de los diputados por ser representantes de la voluntad popular.
Una responsabilidad con "mayúsculas", que ha dicho, exige la lucha contra todas las desigualdades y contra los retos que supone el cambio climático y la violencia contra las mujeres.
Precisamente, haciendo gala de su perfil feminista, Armengol ha incidido en que el maltrato a las mujeres es la "peor lacra de la democracia" y ha condenado los asesinatos machistas que ya suman 35 este verano.
"Mi primer compromiso en esta Cámara será trabajar sin descanso para acabar con la violencia machista", ha puntualizado al tiempo que ha elogiado la constitución del nuevo Congreso y de la XV Legislatura tas producirse "en la más absoluta normalidad".
Una normalidad, que ha dicho supone "asumir los resultados".