Donostia – Normalizar el uso de las lenguas cooficiales del Estado en el Congreso fue uno de los compromisos clave que posibilitaron que la presidencia de la Mesa del hemiciclo cayera del lado del PSOE. La persona que ostenta ese cargo, Francina Armengol, avanzó ayer que lo primero que hará en el ejercicio del mismo será impulsar el acuerdo sobre el uso del euskera, catalán y gallego en la Cámara baja. “Lo primero que voy a hacer es una ronda con los grupos parlamentarios. Me gustaría que el acuerdo fuese amplio. Después entraremos en su ejecución material”, explicó en diversas entrevistas concedidas a medios impresos y digitales.
En sus intervenciones, admitió que fue la primera sorprendida por la rapidez de su elección el jueves, en primera votación, y avanzó que esta legislatura será de “grandes avances”.