Lo llevan en su engranaje. Por eso se mueven al compás de los tiempos que corren y, sobre todo, de los que vendrán en el Bilbao del futuro. Son tres nombres -aunque los ejemplos son más- asociados a otros tantos proyectos que han nacido y han crecido en el botxo. Y lo han hecho de un modo ilusionante. Tanto, que este año el CEIP Juan Manuel Sánchez Marcos, The Eko Lab y la Fundación Bakuva han sido reconocidos con el premio ‘Bilbao Balioen Hiria’ -de entre las 43 propuestas contempladas- que hoy martes recibirán sus ‘trofeos’.
La iniciativa del centro escolar Sánchez Marcos lleva por nombre ‘Arbotante/Arbota-arkua’ y en ella han participado alumnos de 3º y 4º de Primaria, en colaboración con el arquitecto Francisco Javier García de la Torre y el jurado ha destacado “la creatividad de la propuesta y su capacidad de despertar vocaciones por su elevado potencial motivador”, han descrito fuentes municipales.
La iniciativa consiste en una experiencia educativa intergeneracional en torno a la arquitectura, el arte y la ciencia que pone en valor los edificios históricos de la villa y también los oficios de antaño y promueve la igualdad de oportunidades, el trabajo en equipo, la creatividad, la sostenibilidad, la coeducación, el sentimiento de pertenencia a Bilbao.
Otro nombre que ha llamado la atención del jurado ha sido ‘La Bobina’. Se trata de la iniciativa desarrollada por la asociación The Eko Lab que ha montado una aula en torno al mundo textil donde comparten ideas y estrategias personas de distintas edades y perfiles; un espacio abierto que facilita aprender técnicas de costura y artesanía. “Más allá de crear una escuela de costura, se pretende propiciar un lugar de encuentro y diálogo entre generaciones y culturas, donde se genere un intercambio y aprendizaje mutuo de conocimientos, valores y experiencias con la finalidad de contribuir activamente a la cohesión y desarrollo comunitario”, han destacado fuentes municipales.
Convivencia, igualdad, creatividad...
Al mismo tiempo se trabaja en el fomento de prácticas sostenibles, el upcycling, el reciclaje y la reparación. Entre los valores que promueve la idea destacan la convivencia, la igualdad, la sostenibilidad o la creatividad. En este sentido, el jurado ha valorado “unánimemente” el atractivo del proyecto y su carácter intergeneracional, su concepción de espacio de encuentro y aprendizaje mutuo y su marcada apuesta por la sostenibilidad, así como el impacto ambiental de su actividad.
La Fundación Bakuva es otra de las distinguidas en esta edición de los premios ‘Bilbao Balioen Hiria Sariak’ por su iniciativa ‘Proyecto David’, que se basa en ofrecer un servicio de orientación personal, académica y social a los jóvenes que participan en el programa de apoyo escolar de BAKUVA desde tercero de Secundaria hasta la Formación Profesional. El jurado ha destacado el alcance del proyecto y su vinculación con la educación y formación de jóvenes de perfiles muy diversos.
Además de ofrecer este servicio de orientación, “el proyecto busca facilitar un espacio de reflexión, proporcionar información sobre aspectos formativos, responder a las demandas de la juventud y de sus familias, y favorecer el autoconocimiento, entre otros, para lo que generan un ambiente de confianza”, han resumido fuentes municipales.
El resumen. El jurado ha decidido que los tres premios de su quinta edición recaigan en el CEIP Juan Manuel Sánchez Marcos HLHI por su proyecto ‘Arbotante/Arbota-arkua’, la asociación The Eko Lab por su idea ‘La bobina’ y la Fundación Bakuva por su iniciativa ‘Proyecto David’.
El objetivo. Como en las cuatro ediciones anteriores, en la edición de este año se mantiene como objetivo fundamental de estos premios el reconocimiento público del trabajo de agentes locales que desarrollan iniciativas de fomento e impulso de los valores contenidos en la Carta de Valores de Bilbao. Cada una de las entidades premiadas recibirá una dotación de 3.300 euros que deberán estar destinados a fines vinculados con esos objetivos.