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En directo | Jenni Hermoso: "Me estaba besando mi jefe y eso no debe ocurrir"

La futbolista declara en la Audiencia Nacional en el juicio contra Luis Rubiales, quien le "faltó al respeto" por su beso en la final del Mundial
El expresidente de la RFEF, Luis Rubiales
El expresidente de la RFEF, Luis Rubiales / EP

Actualizado hace 2 minutos

La Audiencia Nacional arranca desde este lunes el juicio al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales, acusado de delitos de agresión sexual y coacciones a Jenni Hermoso en relación al beso que la dio tras la final del Mundial de 2023 y que ella asegura que no consintió.

Rubiales, que se enfrenta a una petición de dos años y medio de prisión, se sentará en el banquillo junto al exdirector deportivo de la selección masculina Albert Luque, el exentrenador de la femenina Jorge Vilda y el antiguo responsable de Marketing de la RFEF Rubén Rivera, acusados de coaccionar a la jugadora para que justificase el beso. La primera en declarar será Hermoso.

En su declaración, Hermoso ha negado que diera permiso a Luis Rubiales para besarle en la boca y que este le "faltó al respeto". "Sentí que estaba fuera de contexto totalmente. Sabía que me estaba besando mi jefe y eso no debe ocurrir en ningún ámbito laboral o social", ha relatado.

A preguntas de la teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Marta Durántez, Hermoso ha asegurado que Rubiales manchó "uno de los días más felices" de su vida. "Y para mí es muy importante decir que en ningún momento busqué ese acto y ni mucho menos me lo esperé, porque a mi persona creo que se le faltó al respeto", ha incidido.

Los hechos sucedieron el 20 de agosto de 2023, en el Estadio de Nueva Gales del Sur (Australia). Tras la victoria de la selección femenina del Mundial, cuando Jenni Hermoso recibía el saludo protocolario y la felicitación del entonces presidente de la Federación, éste la besó en los labios sin su consentimiento, subraya la Fiscalía en su escrito de conclusiones.

Durántez destaca que la conducta de Rubiales fue "sorpresiva y sin consentimiento ni aceptación" de la internacional e incide en la "situación de hostigamiento" a la que se la sometió después para que "justificara y aprobara" el beso.

Consentimiento

Una situación de la que también responsabiliza a los otros tres acusados, "personas de confianza" de Rubiales, cuya "privilegiada situación en la RFEF" dependía de la "suerte" que éste corriera, y a quienes acusa de presionar también a familiares de la jugadora para que la convenciesen para afirmar que el beso fue consentido.

Además de la Fiscalía, figuran como acusaciones la propia Jenni Hermoso y la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE).

Todas solicitan las mismas condenas de cárcel que el ministerio público, que reclama también inhabilitación a Rubiales para trabajar en el ámbito deportivo y una indemnización de 50.000 euros, así como prohibición de comunicarse o acercarse a la jugadora durante un tiempo.

El objetivo de las acusaciones en el juicio será demostrar que ese beso del entonces presidente de la RFEF a una subordinada fue de por sí una agresión, con consentimiento o sin él.

Presiones

También que lo que ocurrió después, desde que subieron al avión de vuelta hasta el viaje a Ibiza del que disfrutaron las jugadoras por ganar el Mundial, derivó en un acoso permanente a la futbolista para que negara haberse sentido agredida.

El Juzgado Central de lo Penal dará este lunes inicio a con las cuestiones previas y después la declaración de Jenni Hermoso.

Alrededor de un centenar de profesionales, entre periodistas y técnicos, de unos 70 medios de comunicación y productoras, se han acreditado, según fuentes de la Audiencia Nacional. Quince de ellos son internacionales, procedentes de países como Australia, Francia, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos, México o Colombia.

Los acusados declararán al final y entre los testigos citados figuran varias compañeras de la jugadora en la Selección; su entrenadora, Montse Tomé; y el técnico de la masculina, Luis de la Fuente.

Amenazas

Hermoso ha asegurado que recibió amenazas de personas ajenas al caso y ha reconocido que sintió "miedo" a que la persiguieran por la calle, por lo que su traslado a México fue para ella un alivio: "Encontré una forma de protegerme más a mí misma".

La futbolista lamenta que su vida ha "quedado en 'standby'" desde el beso, momento en el que su psicóloga habitual reforzó su actuación. Preguntada por la teniente fiscal, ha asegurado que "en ningún momento" acudió al terapeuta de la Selección: "No supe nada de él". Hermoso se sintió "totalmente sola" y desprotegida por la RFEF en ese sentido, ya que ningún representante de la Federación le preguntó por el asunto.

2025-02-03T10:46:09+01:00
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