La campaña electoral para las elecciones gallegas del próximo día 18 ya están en marcha. Lugo, A Coruña y Santiago fueron las ciudades elegidas por los candidatos de los tres principales partidos políticos gallegos (PP, BNG y PSdeG-PSOE) para dar el pistoletazo de salida a una campaña que se presenta más incierta de lo que parecía hace apenas un mes.
En unas elecciones determinadas por la incógnita sobre la mayoría absoluta de la que el PP disfruta en Galicia desde hace cuatro legislaturas, el panorama que dibuja el CIS apunta a que cualquier alternativa de izquierdas tiene que pasar por el BNG, junto al PSOE; aunque si ambos partidos se quedan en la parte baja de las horquillas necesitarían también del apoyo de Sumar si logra representación.
En la jornada en la que arranca carrera hacia las urnas, el actual presidente de la Xunta y candidato popular a la reelección por el PP, Alfonso Rueda, se desplazó a Lugo; la líder del BNG y candidata de la formación a la Presidencia de la Xunta, Ana Pontón, abrió la campaña en A Coruña; y el socialista José Ramón Gómez Besteiro, que se estrenó como candidato a la Xunta tras su regreso a la primera línea política, ha escogido su ciudad natal, la de Lugo, para su acto de arranque de la campaña electoral.
Por su parte, Sumar Galicia, con la aspirante a la Xunta Marta Lois a la cabeza, se desplazó a la costa de O Morrazo, la candidata de Podemos, Isabel Faraldo, también escogió A Coruña para el acto de pegada, y finalmente, Álvaro Díaz-Mella, de Vox, inició la carrera en Vigo.
Todos los focos están puestos en el actual presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda. Él y el PP gallego se juegan su poder en Galicia en un escenario que no imaginó. Y es que aunque la gran mayoría de los sondeos pronostican que Rueda dejan en el aire la mayoría absoluta. Entre ellos, está el CIS que recoge la posibilidad de que se quede por debajo de los 38 diputados que le garantizan la mayoría absoluta (ahora tiene 42). Pese a ese favorable viento de partida, entre los populares se respira inquietud. Nunca había afrontado la derecha gallega unos comicios autonómicos con un líder tan poco consolidado.
La oposición se moviliza
Frente a ello, la oposición se muestra convencida de que habrá cambio si logra movilizar al electorado de izquierdas que se suele quedar en casa.
Para el BNG, el hecho de que el PP “importe” a Galicia el discurso del PP de Feijóo de amnistía y Sánchez “es un síntoma de nerviosismo y debilidad, un intento de movilizar a sus votantes”. Rueda pretendía una campaña de baja intensidad, pero la crisis de los pellets le cambió el paso al erosionar la imagen de la Xunta que volvió a repetir los errores del Prestige. “Por primera vez aquí hay partido. Es la primera vez que un candidato de la oposición es mejor valorado que el presidente de la Xunta”, subrayan fuentes del BNG.
Desde el PSdeG-PSOE también consideran “patente” la “debilidad” de Rueda y restan importancia al impacto electoral de la amnistía en Galicia. Fuentes del equipo de José Ramón Gómez Besteiro creen que la activa presencia del expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, que visitará cinco veces la comunidad, actuará como “revulsivo” para movilizar el voto de izquierdas como ocurrió en el 23-J.
Más de 2,6 millones de personas están llamadas a las urnas, de las cuales 1 de cada 6 (casi el 18%) reside en el extranjero. En total, se elige a 75 diputados gallegos (25 diputados por A Coruña; 14, por Lugo; 14, por Ourense y 22, por Pontevedra). Todo apunta a que el voto exterior será clave para que el Partido Popular de Rueda pueda mantener la mayoría absoluta.