El hecho de que no esté garantizado que no vayan a originarse más fugas “en un punto más arriba o por debajo” de la detectada el pasado 26 de septiembre en la conducción general que abastece a todo Arrasate, ha llevado al Consistorio a adoptar una solución definitiva para “evitar más sustos y asegurar el suministro sin sobresaltos”. El edil de Obras y Servicios, Victoriano Fuentes, avanzó ayer que se va a redactar un proyecto para concretar el trazado de la segunda conducción de agua alternativa a la red principal que se activaría en caso de una avería.
Desde el depósito de Antzarrigartu (Zalduspe) hasta Kulturola discurre la tubería general de 500 milímetros de diámetro que, con más de 40 años de uso, abastece a a toda la localidad. A partir de ahí, se despliegan ramales para distribuir el agua a los barrios. Ambos puntos quedarán en un futuro comunicados también a través de la conducción gemela, según precisó Fuentes, para quien en vista de lo ocurrido, “es totalmente necesario contar con un segundo punto de suministro para evitar cortes de agua”.
En cuanto a la sustitución de la tubería dañada, las obras concluirán la próxima semana. “Se han colocado dos tramos de tubería; tres metros inclinados y cuatro en horizontal, en el punto del codo que forma la conducción general soterrada”, detallaron el jefe del área municipal de Obras y Servicios, Moisés Altuna, y el responsable de Mantenimiento, Luis Mari Illarramendi.
La fuga se ha localizado un metro más arriba del citado codo, y aunque las causas que han podido provocar la avería son hipótesis, al desenterrar la tubería deteriorada se ha visto que “el acero se ha ido corroyendo y ha perdido sección; y por la misma presión del agua se ha perforado”, añadió Illarramendi.
No habrá corte de agua
La puesta de nuevo en servicio de la red principal está prevista para “mediados de noviembre” y, por ahora, no se contempla efectuar ningún corte de agua. Además, una vez de que la tubería general esté funcionando no se desconectará el bypass provisional de casi 800 metros de longitud que garantiza en estos momentos el suministro, mientras se reemplaza la tubería dañada. Esta vía alternativa, asimismo, se mantendrá hasta que se ejecute la obra de la conducción gemela, cuyo proyecto tiene que redactarse primero. El bypass temporal ha supuesto una inversión de 92.000 euros, a los que habrá que sumar el coste de la obra civil que está aún sin cerrar.
Por otro lado, la fuga originada a finales de septiembre ha provocado una pérdida de 72.000 metros cúbicos de agua potable, que supondrá para las arcas locales una factura de algo más de 63.000 euros. Este desembolso, en cualquier caso, está por debajo de “los 100.000 euros” que se estimaron inicialmente, porque tal y como explicó Fuentes, la reparación de la avería con la instalación de la tubería alternativa o bypass que se preveía que iba a durar un mes, “se ha reducido a 20 días, y, en consecuencia, esta pérdida de agua (ya solventada), que ha ido a parar al río, ha sido menor”, sentenció el concejal socialista. –A.Dominguez