A principios del mes de diciembre, tras varias denuncias recogidas en la Policía Municipal de Bilbao, la Inspección de Criminalística inició una investigación al detectar cómo en un establecimiento hostelero del Casco Viejo se estaban realizando numerosos cobros con datáfono usando tarjetas bancarias que previamente habían sido denunciadas como sustraídas.
Tras un mes de investigación y después de haber recogido más de una decena de denuncias, las y los agentes pudieron confirmar que los presuntos autores eran los propios regentes del establecimiento. Asimismo concluyeron que utilizaban el datáfono de su local para realizar cobros con tarjetas robadas no vinculados a ninguna venta.
Para evadir los sistemas de seguridad de los bancos, realizaban cobros de pequeñas cantidades de dinero mediante el sistema contactless, evitando así tener que meter códigos.
Esta operación culminó el pasado 30 de diciembre cuando los agentes realizaron el registro del local, en el que incautaron el datáfono utilizado para realizar los cobros, 1.850 euros en metálico, 6 teléfonos móviles y 2 cuadernos de notas. Por todo ello, procedieron a la detención del regente del local y del empleado que materializaba las transacciones, de 35 y 30 años respectivamente, como presuntos autores de un delito de estafa continuada y pertenencia a grupo criminal.
La investigación sigue abierta ya que la Policía Municipal continúa analizando todo el material intervenido para determinar la posible participación de más personas en los hechos delictivos.
Los detenidos ya han sido puestos a disposición judicial.