La forma de buscar destinos vacacionales y contratar viajes ha cambiado mucho en los últimos años. Se ha pasado de ver anuncios de alquiler de apartamentos en un periódico e ir a una agencia a buscar todo a través de internet.
En nuestro país, estas búsquedas aumentan año tras año, según la consultora Gfk, llegando a los 34 millones de personas que acceden a webs y apps relacionadas con alojamiento y transporte. Es decir, que el 86% de la población visita estos sites de manera regular invirtiendo cerca de 2 horas al mes. Pero no solo lo hacen de manera puntual cuando se acercan fechas de vacaciones, sino que más de 12,5 millones de personas lo hacen a diario.
Speakspots
Pero, ¿y si esas búsquedas las pudiese hacer alguien por ti desde cualquier lugar y a cualquier hora? Es lo que ofrecen compañías como Speakspots, la startup española que utiliza la Inteligencia Artificial para diseñar viajes personalizados y, además, ofrece asistencia a través de WhatsApp. Este asistente es capaz de realizar más de 150.000 cálculos en la planificación de cada viaje mediante más de 50 algoritmos desarrollados por la empresa. Esto permite generar itinerarios minuto a minuto tras introducir los datos de cada viaje como fechas, presupuesto y preferencias personales. Después, toda esa información se envía al teléfono a través de WhatsApp, app que le proporcionará asistencia y recordatorios en tiempo real como si fuese su guía turístico particular. La startup ya tiene unos 12.000 usuarios activos mensuales y ofrece planes en más de 40 ciudades de todo el mundo. La mitad de ellas son españolas pero también planifica itinerarios para Buenos Aires, Miami o Río de Janeiro, por ejemplo.
Layla
Para hacer más fácil la tediosa tarea de organizar las vacaciones también surge Layla. A esta asistente solo hay que indicarle el destino y se encarga de reservar vuelos, habilitar reservas de hotel y recomendar actividades que se ajustan a las preferencias y necesidades de cada usuario. Detrás de su desarrollo se encuentran grandes compañías como Booking.com, Skyscanner y Beautiful Destinations.
Para el futuro
Los buscadores tradicionales y empresas de viajes ven el potencial de la Inteligencia Artificial para el sector turístico y ya están desarrollando nuevos asistentes. En el primer caso se encuentra Google que, a través de Gemini, su herramienta que emplea IA, ya ofrece varias propuestas para el viaje. Desde la compañía han creado la versión de pago de este chatbot, Gemini Advanced, que podrá generar itinerarios de viajes con un simple comando en un lenguaje fácil de entender. Y, aunque de momento solo para usuarios en Estados Unidos, también se encuentra la función gratuita IA Overviwes, es decir, “resúmenes de IA” que aparecen en la parte superior de los resultados de la búsqueda. Con esta herramienta se podrá buscar de manera específica. Por ejemplo, si para Google se escribe “destinos en la Costa Brava”, con esta función se podrá indicar “destinos en la Costa Brava cerca de Navarra a menos de cinco horas de viaje”.
Romie
De la mano de la agencia de viajes en internet Expedia surge Romie, aún en fase experimental. Además de organizar los transportes y alojamientos, podrá planificar alternativas a los planes establecidos si ocurre algún contratiempo, ya que monitorea cambios climáticos o inconvenientes de última hora.
Así que ahora que empieza el verano, solo tienes qué pensar cuándo te quieres ir, preparar las maletas y la inteligencia artificial organizará tus vacaciones, sea a donde sea.
Guías turísticos
Cuando viajamos, en general nos gusta que alguien nos explique el lugar que visitamos, los monumentos, su historia. etc. Por eso, la web GuruWalk ofrece (según su web), los mejores guías de free tours del mundo. Se trata de una comunidad que une turistas con guías que ofrecen experiencias únicas. Tan solo es necesario buscar la ciudad que vas a visitar, elegir entre todos los guruwalks disponibles según la ciudad, temática, barrios, etc. y reservar gratis. Es cierto que después es recomendable pagar una cantidad por estos servicios. Desde la web indican que normalmente se paga entre 10 y 20 euros.