El dolor de espalda es una de las dolencias más comunes e incapacitantes en la sociedad actual. Actividades cotidianas como las labores del hogar o hacer la compra pueden empeorar las dolencias cervicales o lumbares y restarnos calidad de vida.
Hay una serie de consejos muy útiles para llevar la compra de forma correcta y prevenir así que surjan posibles molestias. Expertos de TKM Home Solutions ofrecen algunos de ellos:
1- Mantener una postura correcta. Durante la compra, mantén la espalda recta y los hombros relajados. Al levantar las bolsas del suelo o al sacarlas del maletero, procura flexionar las rodillas en lugar de doblar la espalda, ya que al mantenerla recta reducirás la tensión en la columna y en los músculos lumbares.
2- Distribuir el peso de forma uniforme. Al meter la compra en varias bolsas evitarás que se desequilibre la postura y ejercerás una presión desigual sobre la espalda.
3- Usar las dos manos. Siempre que sea posible es recomendable llevar las bolsas con las dos manos para mantener el equilibrio y reducir la tensión en los músculos de la espalda y de los hombros. Además, es importante llevar los brazos pegados al tronco para evitar desequilibrios musculares.
4- Utilizar bolsas adecuadas. Usar bolsas con asas resistentes y acolchadas nos ayudará a llevar el peso de forma más cómoda y reducirá la presión en manos y hombros.
5- Hacer varios viajes. En vez de cargar todo el peso de una vez, mejor repartirlo en varios viajes para evitar el riesgo de lesiones.
6- Organizar la lista de la compra. Distribuir la compra a lo largo de la semana nos permitirá no cargar el mismo día con un montón de objetos pesados.
Una mujer carga la compra en el maletero del coche.
7- Hacer pausas en el camino. Si llevas mucho peso, haz algún descanso en el camino para descansar y estirar los músculos. Deja las bolsas en el suelo flexionando las piernas.
8- Pedir ayuda. Si necesitas levantar objetos pesados o coger productos que están en estanterías altas, pide ayuda. No intentes cargar con más peso del que puedes.
9- Utilizar carrito de la compra. Es mejor transportar las bolsas en un carrito que en la mano. Además, es mejor empujarlo delante de ti que tirar de él llevándolo detrás.
10- Colocar bien los objetos en el carro. Pon los objetos más pesados y voluminosos en la parte inferior de tu carrito de la compra.
Características del carrito
Los expertos señalan que es importante saber elegir el carrito más adecuado a nuestras necesidades. Si ocupa poco espacio y además es fácil de plegar, lo usaremos más porque lo tendremos en casa siempre a mano.
El mango del carro debe ser ergonómico, confortable y ajustable para personalizar su altura, lo que ayuda a mantener una postura ergonómica al empujarlo, evitando estirarnos o inclinarnos hacia adelante en exceso.
Una mujer camina cargada con varias bolsas y un carrito de la compra.
Las ruedas deben ser robustas y estables para que puedan moverse con ligereza sobre diferentes superficies. Las de mayor tamaño ofrecen estabilidad y un desplazamiento más suave. Algunos carros tienen ruedas giratorias que resultan muy prácticas para subir y bajar escaleras.
Su capacidad de carga debe ser adecuada a nuestro volumen de compra, ya que llenarlo en exceso puede deformarlo y volverlo inestable. En cuanto a su material, los mejores son los de aluminio o acero inoxidable, materiales duraderos y ligeros, más fáciles de maniobrar y de transportar.
Prestar atención a estos pequeños detalles te ayudará a prevenir posibles lesiones de espalda que se producen en un segundo y después tardan mucho tiempo en curarse.