Miguel Bosé se ha convertido en un inesperado protagonista tras sufrir junto a sus dos hijos un asalto a su mansión en México. El susto tuvo lugar el pasado viernes en la vivienda del cantante, donde fue retenido con su familia y desvalijado completamente. A medida que van pasando los días, salen a la luz más detalles sobre el atraco, dejando en evidencia que, tanto para el artista como para su gente más cercana, las instalaciones no son tan seguras como parecían.
En 2018, Miguel Bosé decidió abandonar Panamá y establecerse en México por motivos familiares y laborales. La mansión está ubicada en la urbanización de Rancho San Francisco, en Ciudad de México. Un enclave que había pasado desapercibido para los delincuentes, hasta que una banda de encapuchados irrumpió en su propiedad para llevarse posesiones de alto valor, incluido un automóvil de su ex pareja Nacho Palau.
La donde reside Miguel Bosé es una de las más tranquilas y lujosas de la zona, además de estar rodeada de naturaleza. Por ello, no es de extrañar que estos inmuebles estén tasados en unos 3,5 millones de euros. El espacio, de casi 4.000 m2 , es una construcción de estilo rústico con tejas convencionales, pisos de parquet, techos de madera y decorados en tonos café, gris o blanco. Por otra parte, la casa cuenta con cuatro habitaciones, cuatro baños y cuatro aseos. Aunque la estructura de la vivienda y la combinación de colores sean de lo más simple, el autor de ‘Amante bandido’ asegura que lo que el busca es disfrutar al máximo con sus hijos en un entorno de paz.
Un lugar aparentemente seguro