El salario mínimo interprofesional (SMI) acumula, desde su creación en 1963, 58 subidas -cinco años se incrementó dos veces, mientras que otros cinco se mantuvo congelado- hasta alcanzar los 1.000 euros brutos al mes en 14 pagas en los que se situará en 2022.
Este último incremento, fruto del acuerdo alcanzado con los sindicatos, ya que la patronal se ha descolgado de nuevo del mismo, implica un aumento de 35 euros más al mes, de forma que el salario mínimo anual se situará en 14.000 euros brutos con efectos retroactivos desde el 1 de enero.
El salario mínimo se creó en 1963 y se mantuvo congelado durante los tres años siguientes, en tanto que a partir de 1967 se ha ido actualizando anualmente, salvo entre 1976 y 1979, años en los que se subió dos veces cada ejercicio por la elevada inflación, así como en 2004, cuando el PSOE lo actualizó a mitad de año al entrar al Gobierno.
En 1980, con la aprobación del Estatuto de los Trabajadores se estableció su revisión anual, previa consulta con las organizaciones sindicales y patronales más representativas.
Desde 1982 el Gobierno suele fijar el salario mínimo para el ejercicio siguiente en su última reunión del año, aunque esta dinámica se ha roto en los últimos años.
Es precisamente a partir de 1982 cuando el salario mínimo deja de crecer a doble dígito y comienza a moderarse hasta finales de la década de 1990.
A principios del siglo XXI los incrementos salariales se mantuvieron contenidos en el 2 %, si bien con la llegada del PSOE al poder en 2004 comenzó a experimentar incrementos de entre el 4 % y el 6 %, para volver en 2010 a moderarse.
Destacan 2012 y 2014, ya con el PP en el Gobierno, cuando el SMI se congeló, mientras que en 2013 y 2015 se quedó en el medio punto de incremento.
Entre los 2.256 euros de Luxemburgo y los 332 de Bulgaria
El salario mínimo bruto en los 21 países de la UE ha oscilado en 2022 entre los 2.256,95 euros mensuales en 12 pagas de Luxemburgo y los 332,34 euros de Bulgaria, según los datos de Eurostat, la agencia estadística comunitaria, si bien seis países europeos no tienen un salario mínimo: Dinamarca, Italia, Chipre, Austria, Finlandia y Suecia.
Según los datos consultados, de los países de la UE que tienen un sueldo mínimo, hasta ahora sólo España, Bulgaria y Letonia lo habían congelado en 2022, en tanto que los demás lo han incrementado y sólo Lituania lo ha bajado.