El Deportivo Alavés necesitaba reforzar su delantera durante este mercado invernal, y ya lo ha conseguido. Esta misma tarde, los babazorros han hecho oficial la incorporación de Asier Villalibre, quien llega cedido, procedente del Athletic Club, hasta final de la presente temporada, y de esta manera han apuntalado una zona del ataque que, con la marcha de Taichi Hara a Bélgica, se había quedado en ciernes. Sobre todo, si se tiene en cuenta la falta de gol que había mostrado el equipo en algunos partidos.
Villalibre, de 25 años y conocido popularmente como el Búfalo de Gernika, se formó en Lezama y cuenta con experiencia en las distintas categorías del fútbol estatal. En Primera División –y competición europea–, con el Athletic; en Segunda, en las filas de los cachorros, el Numancia, el Real Valladolid y el Lorca; y en Segunda B, al frente del propio filial zurigorri, donde, cabe mencionar, fue considerado en su día como uno de los futbolistas con más proyección, lo que le permitió debutar con el primer equipo muy pronto, en 2016.
También en el Bilbao Athletic, Villalibre completó su mejor curso en cuanto a goles. En la temporada 2018-19, tras su paso, sin apenas éxito, por la categoría de plata, se vio obligado a bajar un escalón y, en la categoría de bronce, marcó 23 tantos en 38 partidos, con lo que dio el salto definitivo a San Mamés. Y allí, en las últimas cuatro campañas, ha sumado 13 dianas a su casillero particular a lo largo de 96 encuentros, 24 de ellos como titular. Ninguna, eso sí, en el presente ejercicio, en el que apenas ha disputado 194 minutos.
Respecto a la operación, lo cierto es que, en un principio, no parecía posible, pues el técnico rojiblanco, el exalbiazul Ernesto Valverde, no estaba muy de acuerdo con el hecho de debilitar su fondo de armario, aunque apenas hubiera contado con el atacante gernikarra. No obstante, la llave que permitió las conversaciones fue, especialmente, la renovación hasta 2025 que firmó el propio Villalibre con la entidad de Ibaigane, reacia a dejarle marchar sin la certeza de que, en el caso de ofrecer un buen rendimiento, pudiese regresar a casa.
Se trata, a la hora de analizar su estilo futbolístico, de un delantero muy similar a Miguel de la Fuente en cuanto a esfuerzo, por lo que no cabe duda de que se dejará todo sobre el césped del Paseo de Cervantes, pero diferente en todo lo demás. Su perfil es más de área, aunque no le supone demasiados problemas abandonarla en ciertos momentos, y sabe definir tanto con los pies como con la cabeza. Algo que, sin ir más lejos, le está faltando al atacante vallisoletano a lo largo de la presente campaña.
PUGNA POR EL PUESTO
Ahora bien, ahora que Villalibre ya es albiazul, es importante mencionar que va a tener que trabajar bastante para hacerse un sitio, al menos como titular, en el ataque del Glorioso; sobre todo, si Luis García mantiene el dibujo de un solo punta. El mencionado Miguel, pese a no ser el más efectivo de cara a portería, está muy bien valorado por el técnico madrileño, quien siempre enaltece su derroche físico, y Mamadou Sylla está ofreciendo últimamente sus mejores minutos con la zamarra albiazul.
Desde que regresó de su lesión, la cual le apartó de los terrenos de juego durante más de tres meses, el delantero senegalés ha demostrado que, aún con aspectos a mejorar, puede ser determinante en la categoría de plata, donde las defensas no son tan expeditivas como en la élite. Solo hay que ver cómo ha brillado en los últimos partidos su capacidad para atacar los espacios y definir en el uno para uno, al igual que cuando defendió los intereses del Girona, al que brindó once goles en la temporada 2020-21.
Sylla se marcha por velocidad de un defensa del Valladolid durante el encuentro copero.